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El titular de Centros Penitenciarios en Michoacán, Ignacio Mendoza Jiménez, aseguro que las personas privadas de su libertad (PPL) pueden mantener un teléfono celular dentro de los reclusorios, mientras cumplen su condena, pues su única restricción es la libertad, más no la comunicación.
«No existe en este país una sola restricción para que un interno no pueda tener un celular», aseguro el secretario.
Esto, luego de que se le fuera cuestionado el hecho de que el pasado 01 de marzo del 2021, fue encontrado un aparato celular dentro de la celda del presunto feminicida, Diego Urik «N» quién está acusado de haber asesinado a la joven maestra, Jessica González Villaseñor.
El titular, además, expresó que el hecho de haber encontrado el teléfono móvil o no, era completamente intrascendente para el caso, aludiendo, además, que esto había sido un error por parte de la Fiscalía General Del Estado de Michoacán (FGE).
«Te voy a contestar de dos maneras, cómo abogado, eso es intrascendente para el asunto de Jessica, fue un error de la fiscalía, esos son los excesos y falta de conocimiento del sistema, nada tiene que ver ese teléfono con los hechos, dos es un distractor nada más», comentó.
Cabe recalcar, que dentro del reglamento de Centros Penitenciarios, se puede leer en el capítulo XI, artículos 53, que queda prohibido introducir al penal cualquier aparato de intercomunicación:
«Artículo 53. Queda prohibida, la introducción de teléfonos celulares, radios receptores, transmisores vía satélite y cualquier otro instrumento de intercomunicación o sistema de comunicación electrónica, de conformidad con el manual de procedimientos correspondientes. La disciplina y el orden en el interior del Centro, deberá mantenerse en todo momento, haciendo uso de los medios proporcionados autorizados por las disposiciones jurídicas y normativas aplicables», se lee en el reglamento.
Ignacio Mendoza concluyó que se tiene una falsa idea al pensar que no se pueden tener celulares dentro, pues únicamente eran personas privadas de su libertad en tránsito, más de otro derecho.
«Todo mundo tiene la falsa idea de que nadie puede tener un celular ahí, son personas privadas de su libertad, de tránsito, todo lo demás lo tienen intocado». Concluyó.
