STAFF/ Marina Alejandra Martínez
El dirigente estatal de Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), Jesús Mora González, rechazó que las manifestaciones realizadas contra los gobiernos estatal y federal puedan desacreditar la imagen de la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo y aseguró que la convocatoria “no fue ni juvenil, ni espontánea, ni apartidista”.
Mora González insistió en que la marcha nació con el objetivo de condenar la violencia, pero terminó mostrando actos violentos que, dijo, contradijeron la intención inicial.
También reiteró que MORENA ha logrado ganar la Presidencia de la República sin recurrir nunca a la violencia.
Cuestionado sobre la presencia de actores políticos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y de Acción Nacional (PAN), quienes habrían sido vistos “manoseando la marcha”, el dirigente subrayó además que la mayoría de los asistentes no pertenecían a la generación Z.
“Estamos convencidos de que esa marcha no fue un movimiento espontáneo, sino que estuvo detrás el PRIAN y en otras ciudades del país hubo una participación muy escasa en algunas entidades de la República y en algunos otros prácticamente nula y sabemos que nuestra presidenta de la República sigue contando con el apoyo mayoritario de la población de México”, defendió, y añadió que en las movilizaciones participaron decenas de personas infiltradas.
No obstante, dijo respetar a quienes se manifestaron de forma genuina, afirmó que Morena siempre ha respaldado que el pueblo salga y se organice cuando exista alguna inconformidad, siempre y cuando la protesta sea pacífica.
“En estas marchas que se han realizado, en algunas de ellas hubo infiltrados de la ultraderecha, grupos radicales que de manera violenta trataron de accesar a Palacio Nacional y palacios de gobiernos de los Estados, y nosotros condenamos la violencia en todas sus expresiones y formas, nuestro movimiento se ha construido en base a un movimiento pacífico”, aseveró.
El dirigente morenista rechazó tajantemente que estas manifestaciones, convocadas para exigir al gobierno estatal y federal el restablecimiento de la paz y el orden, logren afectar la imagen de la jefa del Ejecutivo federal.
Reconoció que hay desafíos importantes en materia de seguridad, pero sostuvo que Michoacán “nunca ha sido un gobierno omiso ni que le dé la espalda al pueblo”.
Finalmente, reiteró que su partido no avala “el oportunismo del PRIAN, que de manera sistemática ha venido descalificando las acciones del gobierno, tanto federal como estatal, para sacar raja política valiéndose de desgracias”, y lamentó que la oposición utilice estos eventos como bandera “de una manera muy carroñera”.
