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El exgobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, obtuvo una suspensión provisional que impide que sea detenido por ahora, a pesar de las acusaciones en su contra por desvío de recursos públicos durante su gestión.
La medida fue otorgada por el Juzgado Decimoprimero de Distrito en Materia Penal, con sede en la Ciudad de México. Esta suspensión, que es temporal, tiene como condición que el exmandatario deposite una garantía de 52 mil pesos en los próximos cinco días. Si cumple con este requisito, no podrá ser arrestado mientras se resuelve si se le concede o no suspensión definitiva.
Silvano Aureoles es investigado por la presunta malversación de más de 3,400 millones de pesos, fondos que supuestamente estaban destinados a la construcción de cuarteles policiales en Michoacán durante su sexenio. La Fiscalía Especializada en Materia de Combate a la Corrupción ya obtuvo órdenes de aprehensión en su contra y también contra siete de sus excolaboradores, lo que marca un avance importante en las investigaciones judiciales por presuntos actos de corrupción.
Esta suspensión no lo exime de enfrentar el proceso legal, pero sí le permite mantenerse en libertad por el momento. En los próximos días, el juzgado decidirá si le concede la suspensión definitiva, que le daría más tiempo para enfrentar el proceso sin ser detenido.
El futuro legal del exmandatario dependerá del fallo sobre la suspensión definitiva, pero el proceso judicial y las investigaciones por corrupción siguen avanzando. Aunque por ahora logró evitar ser detenido, eso no significa que esté libre de enfrentar consecuencias legales. La Fiscalía continúa armando el caso en su contra y, en caso de que se le niegue la suspensión definitiva, podría ser detenido en cualquier momento.
