STAFF/ Patricia Martínez @PatrixMtz
Alrededor de 90 personas provenientes de diferentes municipios de Michoacán protestaron a fuera de la Secretaría de Salud, para exigir la reinstalación del servicio de hemodiálisis suspendida desde el 30 de agosto, debido a que la empresa contratada por el gobierno estatal, Operativa Hospitalaria SJ, no recibió el pago correspondiente.
Ana Luisa Gómez Ibarra, representante de la Asociación Michoacana para la Defensa de los Derechos de la Salud, denunció la gravedad de la situación y su impacto en unos 450 pacientes.
“Es una situación que nos preocupa. Porque ya existe un mandato judicial para que el gobierno tenga que pagar estas hemodiálisis, sin embargo, desconocemos por qué hacen esta suspensión.”, expuso, al señalar que no es la primera vez que suspenden el servicio.
Las clínicas afectadas están ubicadas en Apatzingán, Cuatro Caminos, Uruapan, Peribán, Zamora, La Piedad, Sahuayo, Pátzcuaro, Morelia, Maravatío, Ciudad Hidalgo y Zitácuaro. La empresa justificó la suspensión debido a irregularidades en la prestación del servicio y consideró excesivo el número de hemodiálisis brindadas.
Además, la empresa que ofrece hemodiálisis en Michoacán anunció una revisión interna para optimizar el servicio, pero adelanto que reducirá el número de sesiones semanales para los pacientes. Esto afectará gravemente a aquellos que necesitan tres sesiones, ahora solo recibirían dos, y a los que necesitan dos, solo una.
Gómez Ibarra señaló mientras tanto, los pacientes ahora deberán costear por su cuenta las sesiones, generándoles gastos alrededor de 3,900 pesos semanales, a pesar de tener derecho a acceder al servicio de manera gratuita según juicios de amparo.
Por último, el secretario de Salud, Lázaro Cortés Rangel, se comprometió tener una mesa de diálogo con los manifestantes, para atender sus peticiones y sobre todo que se restablezca el servicio de hemodiálisis de forma completa.