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El pasado 21 de septiembre del 2020, Diego Urik «N» es acusado de arrebatarle la vida a la joven maestra, Jessica Gonzalez Villaseñor, y como ya se mencionó en alguna ocasión, tras abandonar su cuerpo, saqueo su billetera y gasto el dinero de la chica, en un casino de la ciudad, terminando en su casa alrededor de las 20:00 horas de ese día, acciones que se creía, habían sido las únicas que el presunto feminicida había tenido tras su atroz acto.
Pero no es así, tras acabar con el dinero de su víctima, y esa misma noche, Diego Urik, tomo su vehículo, y en compañía de quién se presumía ser su «Mejor amiga» Hanna «S» recorrieron al menos cinco puntos de la ciudad, y con el auto en movimiento, arrojaban las pertenencias de la joven maestra por la ventana.
Esto, revelado por la perito Karla «N» especialista en Inspección Y Descripción De Lugares, que con ayuda de Diego «S», Yahir «N» y Hanna «S», quienes fuesen amigos del imputado, pudo realizat la reconstrucción de los hechos ocurridos la noche del 21 y madrugada del 22 de septiembre del 2020.
De acuerdo con la especialista, perteneciente a la Fiscalía General Del Estado (FGE) fue el pasado 20 de noviembre del 2020, cuando realizó el recorrido con los jóvenes, quienes en todo momento estuvieron acompañados de su abogado, y fue Hanna «S» quién compartió los detalles para encontrar varias pertenencias de Jessica Gonzalez.
«Dicho recorrido lo realizó Hanna con Diego Urik, el 22 de septiembre, y regresaron a su casa ese día en la madrugada (…) Ahí refiere Hanna, que Diego comenzó a tirar objetos por la ventana, sin detener la marcha», empezó a atestiguar la perito.
De este modo, la perito relata que el recorrido inicio dentro del fraccionamiento «Bosques Monarca» dónde Hanna le contó que en la calle «Selva Negra» era donde generalmente, mantenían relaciones sexuales dentro del vehículo de Urik, ahorrándose el comentario de si ese día habían tenido algún encuentro de ese tipo.
Posteriormente, abandonaron la residencia, y salieron del fraccionamiento, alrededor de la medianoche, avanzando por la calle Alba dónde se encuentra cerca una tienda de conveniencia, misma a la que Diego ingreso, adquirió un encendedor, rodeo la sucursal, y abandono ahí, el bolso de mano, color rosa, de Jessica Villaseñor.
Diego subió al automóvil, y continuaron su camino, por la Av. Juan Pablo II, dónde, a la altura de la Taquería «El Infierno», Urik comenzó a arrojar «cosas» por la ventana, sin detener el vehículo.
La tercera y última parada, fue la Av. Amelia Solorzano, dónde de acuerdo con la versión de Hanna, Urik descendió del carro, y a pie, abandono una bolsa de basura, en color negro, justo a botes que se encontraban en la misma calle.
Tras estás acciones, ambos jóvenes volvieron a casa del imputado, alrededor de las 2:00 de la madrugada, dónde se presume, pasaron la noche juntos.
Es de recalcar, que de las pertenencias de las que el presunto «Feminicida de Altozano» intentó deshacerse, fueron recuperados unos lentes de lectura, junto a su estuche, además el bolso de mano de la joven.
Al momento, siguen desaparecidos el teléfono móvil de la víctima, así como sus zapatos, y algunas identificaciones.
