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Colectivas feministas del estado de Michoacán que conformar ILEMich, esto en siglas de Interrupción Legal del Embarazo, han manifestado estar en contra de las iniciativas propuestas por los diputados, Yarabí Ávila y Baltazar Gaona, las cuales serían votadas el día de mañana 15 de febrero.
Lo anterior debido a que la diputada priista busca que tanto niñas, como mujeres embarazadas que no quieran tener a su bebé puedan darlos en adopción desde el vientre, y por su parte, Baltazar Gaona busca “una supuesta” protección a las mujeres embarazadas y futuros bebés.
Las feministas michoacanas que integramos ILEMich manifestamos nuestro PROFUNDO RECHAZO a las iniciativas presentadas…
Publicado por ILEMich en Domingo, 14 de febrero de 2021
Aquí el manifiesto integro de los colectivos feministas.
“Las feministas michoacanas que integramos ILEMich manifestamos nuestro PROFUNDO RECHAZO a las iniciativas presentadas por la diputada Yarabí Ávila González y Baltazar Gaona, que pretenden ser votadas este próximo lunes 15 de febrero en sesión del Pleno del Congreso del Estado de Michoacán.
La iniciativa de la diputada Yarabí Ávila, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que pretende adicionar el artículo 32 bis a la Ley de Adopción del Estado de Michoacán, para que las mujeres y niñas embarazadas que no deseen continuar con la gestación, puedan dar a sus hijas e hijos en adopción desde que están aún en el vientre. La iniciativa de Baltazar Gaona García, diputado por el Partido del Trabajo (PT), plantea un concepto anticonstitucional:
el supuesto “derecho a la vida desde la concepción”, maquillándolo como protección a las mujeres embarazadas y sus futuros bebés. Esta falacia, porque no existe tal derecho, viola el artículo 4º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, donde se protege nuestra libertad reproductiva, la cual “consiste en el derecho de las personas a decidir de manera libre, informada y responsable sobre el número y espaciamiento de sus hijos y el libre desarrollo de su personalidad”.
Es decir, el derecho que tenemos a decidir si queremos ser madres o no, cuántos hijos tener y cuándo tenerlos.
Estos diputados, como muchas otras personas que se posicionan en contra de los derechos humanos de las mujeres, utilizan un argumento que se basa en una interpretación equivocada de nuestras leyes, citando el artículo 4º, fracción I, de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, que señala:
“Toda persona tiene derecho a que se respete su vida. Este derecho estará protegido por la Ley y, en general, a partir del momento de su concepción.
Nadie puede ser privado de la vida arbitrariamente.” Sin embargo, México, al adherirse a esta Convención en 1981 y ratificarla en 2002, incluyó una Declaración Interpretativa que indica que la expresión “en general”, implica que el Estado mexicano “tendría libertad para legislar sobre el tema del aborto, no la de excluirse de la obligación de proteger la vida de personas ya nacidas”.
Es decir, que en nuestro país no existe tal cosa como el “derecho a la vida desde la concepción”. Intentar legislarlo no sólo se contrapone a nuestra Constitución, sino que busca limitar los derechos que las mujeres hemos exigido y conquistado por décadas.
Nuestra Constitución sí protege el derecho a la vida, pero de las personas nacidas vivas. Y por supuesto que también protege a los no nacidos, pero siempre en función de garantizar los derechos y el bienestar de la mujer.
Por tanto, ni los embriones ni los fetos son sujetos de derecho, lo son las personas nacidas vivas. La adopción no es un supuesto derecho al que puedan aspirar fetos ni embriones, el derecho real es el que tienen los niños, niñas y adolescentes nacidos vivos, a tener una familia.
Por otro lado, nuestro sistema estatal de adopción, a través del DIF, es terriblemente ineficaz. Al día de hoy, en Michoacán hay 378 niñas, niños y adolescentes en albergues que no han podido ser dados en adopción, la mayoría por una burocracia exacerbada. En administraciones pasadas se concretaban alrededor de 70 adopciones anuales, mientras que en la actual la media anual ronda apenas las diez. En lo que va de este año, se ha concretado únicamente una adopción.
Otra cuestión que nos alarma es que la propuesta de la diputada Ávila abre las puertas a la corrupción, la gestación subrogada (alquiler de vientres), el tráfico de menores y la trata de personas, marginando particularmente a las mujeres precarizadas y racializadas. Todo esto sucede en un estado cuya capital ha sido señalada como sede de una de las redes más grandes de pederastia a nivel nacional.
Finalmente, esta iniciativa obligaría a niñas y mujeres que no desean ser madres a terminar su embarazo en contra de su voluntad, sin considerarlas circunstancias ni las razones que han dado origen a esos embarazos. Esta forma aberrante de ejercer el poder sobre el cuerpo de las mujeres se denomina embarazo forzado y ha sido descrito como forma de violencia por razón de género que puede constituir tortura o trato cruel, inhumano o degradante, de acuerdo a la Recomendación general número 35 del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer, conocido como Comité de la CEDAW.
La aprobación de estas iniciativas significaría un grave retroceso en materia de derechos humanos de las mujeres de Michoacán. Y no dejaremos que suceda, porque la maternidad será libre y deseada, o no será.
Colectiva Itsï (Pátzcuaro)
Moiras (Morelia)
Heroica Revolución (Zitácuaro)
Incendiarias (Morelia)
Libres Morelia
Las Matrioskas (Morelia)
Asamblea de Mujeres Michoacán
PAR:ES (Morelia)
Baubo Ultrapúrpura (Morelia)
ELLAS (Morelia)
Defensoras Digitales Michoacán
Parlamento Feminista Nietas de las Sufragistas
Radio Cósmica Libre (Morelia)
Colectivo Tahnapiti (Uruapan)
Las Nietas de Lilith (Morelia)
Las Asambleístas (Morelia)
Las Montoyas (Morelia)
Colectiva Sïkuame (Morelia)
Diosas del Huéyatl (Lázaro Cárdenas)
Lilith «La Roja» (Morelia)
