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Trabajadores del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) montaron este jueves sus propias ofrendas en memoria de dicho proyecto, que continúa trabajos pero que será suspendido de manera definitiva el 1 de diciembre por Andrés Manuel López Obrador.
De acuerdo con fotos difundidas por el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM), las ofrendas fueron colocadas dentro del polígono principal de la construcción en Texcoco y en un centro de agua y saneamiento ubicado al sur del lago Nabor Carrillo, cuyo impacto ambiental por la obra fue señalado por activistas como uno de los principales argumentos para desistir del proyecto.
Los altares temáticos recuperan desde el diseño original de la obra, hasta los edificios de terminal de pasajeros y las pistas de aterrizaje y despegue. Pese a que el gobierno de transición estima en 100 mil millones de pesos el costo de la cancelación de la obra, el GACM dijo esta semana que los trámites de suspensión de contratos contemplarían, al menos, 120 mil millones de pesos, mientras
