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El reportero gráfico Julio César Maycotte, camarógrafo del portal de noticias IMAR MX, fue “levantado” y golpeado brutalmente “sin ninguna explicación y con total abuso de poder” por parte de policías de la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán.
Ello lo ha denunciado este lunes su propia empresa a través de una nota informativa que aquí reproducimos íntegramente:
“Sin ninguna explicación y con total abuso de poder, policías de la Secretaría de Seguridad Pública «levantaron» y golpearon brutalmente el pasado sábado a Julio César Maycotte, camarógrafo de IMAR MX.
Lo anterior luego de que Maycotte, acudiera al fraccionamiento Libertad, cercano a la avenida Siervo de la Nación, para atender la denuncia de vecinos que se quejan por los altos índices de asaltos y robos a casa habitación que prevalece en lugar, situación por la que han tenido que cerrar algunas de las calles, así como pedir cooperación para pagar vigilancia ante la incompetencia de las autoridades de seguridad.
Cuando nuestro compañero intento comenzar a grabar algunos aspectos del fraccionamiento, un elemento de seguridad privada le pidió identificarse y de inmediato solicito apoyo por radio. Minutos más tarde llegaron otro 3 uniformados, uno de ellos grabando con su celular a Julio César.
En cuestión de segundos apareció una camioneta negra rotulada con logos de prensa. Los policías de seguridad privada, procedieron a preguntarle al conductor de dicho vehículo si conocían a Maycotte, a lo que el presunto periodista respondió negativamente y descendió junto con su copiloto de la unidad.
Extrañamente, ambos sujetos le pidieron a Maycotte identificarse y de igual manera nuestro compañero les solicitó lo mismo, ya que no los reconoció como compañeros del medio.
Uno de los presuntos periodistas se puso agresivo y gritando le reclamo a Maycotte haber grabado, «lo que estamos haciendo es por la seguridad de la colonia», le dijo. A lo que nuestro camarógrafo respondió que sí era periodista él sabía porque tenía que grabar, lo que desato la euforia del sujeto, quien se torno aún más agresivo.
En medio de la discusión, salió un vehículo del fraccionamiento. El chofer, le cuestiono a uno de los policías de seguridad privada qué era lo que sucedía y de inmediato ordeno detener a nuestro camarógrafo.
Al escuchar la orden, Julio César le llamo vía telefónica a un compañero para alertarle de lo que estaba sucediendo. En ese instante se acerco el conductor del carro que salió del fraccionamiento, quien también le exigió que se identificara y le extendió la mano a manera de saludo. Al darle la mano, Julio César, de inmediato recibió el primer golpe en la cara y fue sometido.
Posteriormente, le cubrieron los ojos con su misma playera, fue llevado a la parte de atrás del automóvil donde continuaron golpeándolo, sin ninguna explicación ante la pregunta de Maycotte de quienes eran. Ante la negativa por identificarse, ambos sujetos sólo señalaron ser ministeriales.
Después llego una patrulla de Seguridad Pública de donde descendieron dos policías estatales, lo esposaron y lo «treparon» a base de empujones a la parte de atrás de la unidad.
A partir de ese momento, nuestro compañero solo recuerda que en un determinado punto le ordenaron bajar de la camioneta, pero impedido por los golpes que ya había recibido terminaron bajándolo, otra vez a empujones, y luego lo pusieron de rodillas. Seguía con los ojos tapados.
Así de rodillas, lo golpearon brutalmente en repetidas ocasiones en la espalda, piernas, pecho, costillas? prácticamente en todo el cuerpo. Mientras le reclamaban el estar grabando en la colonia, con palabras altisonantes y amenazándolo de muerte, además le exigían que les indicara quién lo había mandado. Cuando intentaba responder más fuerte lo agredían.
Entre los golpes que estaba recibiendo, escucho una voz que pidió que ya lo dejaran. «Ya la cagaron», dijo un tercer sujeto que Julio supone llego más tarde.
Tras la golpiza, lo llevaron al vehículo de la empresa, que cabe señalar los mismo agresores trasladaron hasta el lugar a donde fue llevado. Ahí le quitaron las esposas, lo obligaron a llamar a la redacción para que no se subiera nada de información de lo que había grabado porque «no queremos que nadie sepa de esto porque me calientas la zona, ya que estamos en una investigación. Hay una casa de seguridad y no queremos que se vaya abajo la investigación», recuerda que le dijeron.
Mientras tanto, Julio estuvo recibiendo constantes llamadas del compañero al que previamente le había informado de lo que pasaba mientras pretendía grabar. Le ordenaron que contestara y los sujetos se fueron, pero antes revisaron el vehículo y su equipo de trabajo? se llevaron la tarjeta de la cámara fotográfica, la de video, así como la pila de la cámara de video. Le exigieron que no la hiciera de «pedo».
Cuando finalmente pudo ver se dio cuenta que estaba detrás de las oficinas de la sección XVIII de la CNTE.
Exigimos el total esclarecimiento de la brutal agresión que sufrió nuestro compañero Julio César Maycotte.¡El gremio periodístico de Michoacán merece respeto!”
El link de la nota original:
http://www.ignaciomartinez.com.mx/noticias/levantan_y_golpean_brutalmente_a_julio_cesar_12142
En changoonga.com nos solidarizamos con la exigencia de esclarecimiento que pide el equipo de IMAR MX.
