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A pesar de que autoridades federales ya han declarado en repetidas ocasiones que todas las personas podrán accesar a servicios de salud para ser atendidos en caso de contagiarse de coronavirus, tal parece que no todos han tenido suerte en ver esa realidad.
Y es que un abuelito indigente de 81 años de edad, tuvo que resguardarse dentro de un cajero automático luego de que se le negara atención hospitalaria, esto a falta de camas para atender pacientes.
El señor de la tercera edad que se encontraba dentro del cajero, presentaba tos, dificultad para respirar, temperatura alta y otros síntomas acordes al COVID-19, de igual manera, portaba un documento que había sido entregado por el Hospital Gea González, en donde se le había diagnosticado “neumonía atípica”.
Luego de que se diera a conocer el hecho, al sitio llegaron algunos activistas, así como elementos de la policía, quienes solicitaron una ambulancia para trasladar al indigente a un hospital; lamentablemente, tuvieron que pasar cuatro horas para que el señor pudiera recibir atención médica, se desconoce su estado actual de salud.