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El hermano del exlíder de autodefensas asesinado, Hipólito Mora, Guadalupe Mora, denunció que su sobrino Alejandro Torres Mora y la esposa de este fueron asesinados el sábado 1 de noviembre por integrantes del grupo delictivo “Los Viagras”, y acusó que el gobierno ha abandonado por completo a la población de la Tierra Caliente.
En entrevista para el programa “Me lo Dijo Adela”, conducido por Adela Micha, relató que el ataque ocurrió a plena luz del día, cerca de un canal y a unos 500 metros de un retén de la Guardia Nacional y del Ejército que no intervino, pese a que “mucha gente vio” el crimen.
“Ahí estaba un retén de la Guardia Nacional y de militares, y no hicieron nada, dejaron que los mataran”, afirmó.

Mora acusó que el crimen organizado actúa con protección del Estado y que las autoridades saben perfectamente quiénes son los responsables, pero no los detienen. Dijo que los delincuentes operan libremente en municipios como Buenavista y Aguililla, mientras el gobierno finge que investiga.
“El crimen está cobijado por el gobierno. Si no los quieren detener es porque hay complicidad”, comentó.
Recordó que desde el asesinato de su hermano Hipólito Mora ha exigido justicia sin obtener resultados, pese a haberse reunido en varias ocasiones con el fiscal Carlos Torres Piña para pedir la detención de los responsables, pero aseguró que solo recibió promesas vacías y respuestas que nunca se cumplieron.
“Me salió con lo mismo de siempre, que en eso están, pero nunca los detienen”, lamentó.
También criticó al gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, de quien dijo que la población “ya no lo quiere”, y rechazó la estrategia federal de “abrazos y no balazos”.
“Necesitan ser mano dura con ellos. Por eso hacen lo que quieren, porque no les hacen nada”, señaló.

Advirtió que en municipios como Apatzingán y Uruapan ya se escuchan rumores de que las comunidades podrían volver a tomar las armas ante la falta de justicia y protección.
“Ya se está escuchando en Apatzingán y Uruapan que quieren defenderse, porque de plano el gobierno no lo hace. Pero si lo intentan, los mismos militares los van a querer desarmar”, comentó.
Mora también se refirió al asesinato del alcalde Carlos Manzo, con quien mantenía una relación cercana, y recordó que el propio edil había advertido lo que podría ocurrir si algo le pasaba a él o a su gente.
“Dijo que si le pasaba algo a él o a los suyos, se iba a salir el tigre enardecido”, expresó.
