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La presidenta Claudia Sheinbaum presentó una demanda contra Google por modificar el nombre del Golfo de México a «Golfo de América» en sus mapas dentro de Estados Unidos.
El cambio se realizó tras una orden ejecutiva del presidente Donald Trump, emitida en enero de 2025, que instruye a las instancias federales estadounidenses a usar esa nueva denominación en documentos y plataformas oficiales. Sin embargo, Google aplicó el cambio a todo el cuerpo de agua, no solo al área correspondiente a Estados Unidos, lo que desató la molestia del gobierno mexicano.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum explicó que el Golfo de México es una entidad marítima compartida por Cuba y Estados Unidos, y que Google no tiene autoridad para cambiarle el nombre en su totalidad.
«Se trata de una región internacionalmente reconocida. No se puede borrar con un clic nuestra soberanía y la historia que compartimos con esta zona», dijo la mandataria.
La demanda exige que Google rectifique y mantenga el nombre oficial «Golfo de México» en las porciones que corresponden a México y Cuba, respetando así la nomenclatura aceptada por organismos internacionales y tratados vigentes.
El caso ha generado polémica, pues pone sobre la mesa el poder que tienen las plataformas digitales en influir en la percepción geográfica y política del mundo, así como la responsabilidad que tienen frente a conflictos diplomáticos.