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Tras el testimonio de poco más de una hora, ofrecido por Diego Urik «N» quién está imputado en el presunto feminicidio de la joven maestra Jessica González Villaseñor, declaró su absoluta inocencia, e insinuó, que el verdadero asesino de la joven moreliana, sería un amigo que ambos tenían en común, y que para sorpresa del juez, y toda la audiencia, ya presentó testimonio contra Urik.
«La fiscalía pretende que pague por un crimen que no cometí, pretenden utilizar tres testimonios clave, el de Diego S, Hanna S y Yahir N, para inculparme», dijo el chico.
Tras esto, Urik dijo ante el togado «Le voy a contar todo lo que ocurrió realmente el 21 de septiembre», y comenzó a relatar su día, desde que despierto al rededor de las 9:00 a.m., desayuno, hizo ejercicio, y recibió una llamada de Yahir «N» quién entonces, era uno de sus amigos más cercanos.
«No mames, te pasaste de v*rga, sabes que a mí me gusta Jessica», relato Urik que Yahir le gritó en repetidas ocasiones al contestar el teléfono, pidiendo Urik, que se calmara, y hablaban más tarde, colgando así el teléfono.
Siguiendo con el relato, Urik plática quedó de verse ese mismo día con Diego S y Yahir N por la tarde, recibiendo entonces un mensaje de una «mujer» con la que mantenía encuentros sexuales casuales, retrasando entonces la salida con los chicos, para poder atender su compromiso amoroso.
«Recibí el mensaje de una chica, con la que ocasionalmente tenía encuentros sexuales, y quedamos de vernos a las 5:00 fuimos la Hotel Aqua, por eso a las 5:38, cómo dice la fiscalía, se puede ver mi carro en el periférico», comenta Diego Urik.
Luego del encuentro amoroso, el presunto feminicida acudió con sus amigos, recibiendo como saludo una disculpa por parte de Yahir «N» relacionado a como le había hablado desde la mañana de ese 21 de septiembre.
«Yahir me pidió perdón (…) Pero le mintió a la fiscalía, de acuerdo con los datos conservados, se puede ver qué Yahir estuvo toda la mañana en casa de Jessica, y vino aquí a decir que no se conocían, cuando yo los había presentado desde julio del 2020», sentenció el joven.
Finalizó su testimonio, pidiendo al juez de control, Ariel Montoya Romero, se hiciera justicia en esta situación, pues el llevaba en prisión dos años, tres meses y once días, por un delito que no cometió, alegando que la Fiscalía General Del Estado de Michoacán (FGE) tan solo estaba armando un caso en su contra.
