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Luego de que se diera a conocer que la estatua recién develada del presidente Andrés Manuel López Obrador en Atlacomulco, Estado de México, conocido como “la cuna del priismo”, fuera derribada, el mandatario federal ha declarado que quiere mucho a sus seguidores, pero pidió que por favor no le pongan estatuas.
“Los quiero mucho, pero no quiero ni estatuas ni calles con mi nombre”. Comentó el presidente.
Asimismo, el presidente agradeció la iniciativa de colocar una estatua en su honor, y explico que es fiel creyente de que “amor con amor se paga”.
“A los que se organizaron e hicieron una estatua de mi persona [quiero] decirles que los quiero mucho y que les agradezco mucho por su iniciativa; que son mis amigos del alma, como millones de mexicanos; que son mis amigos del alma, que nos queremos mucho y que amor con amor se paga”, dijo AMLO.
Asimismo, recordó a sus seguidores que en varias ocasiones ha pedido que no se le hagan estatuas o se nombren calles con su nombre.
“Tomen en cuenta que yo he expresado que no quiero que pongan a calles, parques, bibliotecas, escuelas, mi nombre. Ni quiero, tampoco, que me levanten ninguna estatua. No quiero nada de eso. Lo he expresado varias veces”. Argumentó el presidente.
Por último pidió a las personas responsables de erguir la estatua que no se sientan mal de que haya sido derribada pues eso es secundario y reiteró su negativa a que se le honre con estatuas.
“Eso es secundario. Lo importante es decirles que no se sientan mal, que yo les agradezco mucho por sus buenas intenciones pero que también me hagan caso porque no me gusta lo que tenga que ver con la vanidad o el culto a la personalidad”, agregó el Presidente.
Fue el pasado 1 de enero cuando se informó que durante la madrugada la figura casi recién develada de AMLO en Atlacomulco fue derribada y decapitada, hasta el momento no se tienen ningún presunto responsable.
