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Nataly Cruz, joven oriunda de Torreón, Coahuila, falleció sin haber podido bailar un vals con su hermoso vestido azul, destinado para la importante fecha de sus quince primaveras, pues un hongo que se encontraba en pulmones y cerebro terminó por cobrar su vida.
Era una mañana de desayuno familiar, cuando la adolescente empezó a sentirse repentinamente mal, por lo que tuvo que ser hospitalizada en la clínica 71 del Seguro Social en su ciudad de origen.
Mientras se encontraba internada se le diagnosticó la presencia del hongo Cryptococcus en sus pulmones y su cerebro, aparentemente adquirido por el contacto con heces de paloma.
El organismo ya había consumido buena parte de ambos órganos, por lo que a pesar de los esfuerzos del personal médico Cruz, ella falleció.
Sin haber cumplido su sueño de visitar Mazatlán, la casi quinceañera murió, realizando su funeral el día en que se celebrarían sus XV años, el sarcófago, azul rey como el que sería su vestido fue despidió por amigos y familiares en el Panteón Municipal de Torreón.
