La mayoría de los negocios del Centro Histórico tenían las cortinas abajo pero eso no fue impedimento para que las familias saliera a caminar o tomarse la foto
STAFF/ Margarita Arreola – @marguiarreola
Esta navidad atípica y pandémica, se vivió con la mayoría de los negocios cerrados en la ciudad sin excepción del centro histórico, a pesar de ello cientos de familias decidieron salir a pasear y tomarse la foto.
Las calles presentaban poca movilidad vehicular y la mayoría de la gente se concentró en las plazas públicas como San Francisco, punto concurrido por el árbol monumental.
La Plaza de Armas y la Melchor Ocampo, así como la cerrada de San Agustín, eran donde había más personas por el show de los payasos y la venta de ambulantes que invadían las banquetas y calles con papas, garbanzos, sombreros, rusas, churros y demás accesorios.
Los portales donde hay negocios como restaurantes y cafés también estuvieron concurridos sin llegar a la saturación, puesto que eran más personas las que paseaban y tomaban fotos lo que hace pensar que en su mayoría eran turistas.
Como toda Navidad la mayoría de la actividad comercial estaba paralizada pues este día es común que se otorgue de descanso y salvo algunos negocios como cafés y hoteles mantuvieron las puertas abiertas.