La Cuarta Revolución…¿Salvar Vidas O Salvar La Economía? Una Falsa Dicotomía
La pandemia del COVID-19 continúa propagándose, el día de hoy México ha entrado oficialmente en fase 2, lo que significa que la transmisión comunitaria ha iniciado y se requieren medidas más estrictas por parte del gobierno y los ciudadanos para detener la transmisión
By: Manuel Ochoa
La pandemia del COVID-19 continúa propagándose, el día de hoy México ha entrado oficialmente en fase 2, lo que significa que la transmisión comunitaria ha iniciado y se requieren medidas más estrictas por parte del gobierno y los ciudadanos para detener la transmisión. Hoy finalmente el Gobierno Federal, y en particular el Presidente de la república, acepta una realidad que se negó a ver y a afrontar, una gran lección para el, negar el problema no significa que no exista.
Nos enfrentamos a un nuevo reto como país, las medidas de contención serán más rigurosas, con lo que se busca aplanar la curva de contagios con el objetivo de no superar la capacidad de las instalaciones e infraestructura médica del país, a pesar de que esto signifique alargar el tiempo en el que serán necesarias las medidas de distanciamiento social.
Sin embargo, aplanar la curva de contagio implica profundizar negativamente la curva de recesión económica, las medidas de contención generan una irrupción en la economía que reduce drásticamente el consumo y la demanda de bienes y servicios, detiene las cadenas de producción y distribución, y genera un desequilibrio entre oferta, demanda y precios.
Estas medidas, necesarias para salvar vidas, generarán pobreza, desempleo y una caída significativa en los ingresos familiares, aquí es donde entra en acción la intervención y acción del Estado para aplanar la segunda curva: la curva de recesión económica.
Para aplanar esta curva, igual de importante que la primera por sus efectos de mediano y largo plazo en la calidad de vida, son necesarias políticas económicas de carácter extraordinario expresadas a través de paquetes de rescate con inyección de capital y liquidez en la economía hacia los sectores económicos más vulnerables que se encuentran en riesgo inminente de quiebra o con afectaciones profundas y estructurales.
Dichos paquetes tienen que ser implementados con la misma urgencia que las medidas de contención sanitaria para que sean efectivos, no solamente estamos hablando de la reducción de la carga fiscal a personas físicas y morales, se necesitan transferencias directas para trabajadores de sectores vulnerables en riesgo de ser despedidos (turismo, restaurantes, servicios etc.), a los trabajadores independientes que no cuentan con ingresos fijos, a los comerciantes que viven al día, a los desempleados para poder subsistir durante la contingencia en una época de nulas contrataciones.
La siguiente gráfica, que podemos encontrar en el artículo de Baldwin (2020), ejemplifica el efecto de las medidas de contención y de las medidas económicas en la curva de contagio y en la curva de recesión. El objetivo debe ser lograr la curva azul superior y la curva verde punteada, esta combinación es el punto de minimización de muertes y recesión económica.
Gráfica 1 La recesión generada por las políticas de contención puede ser mitigada con políticas económicas
Esto nos hace visualizar que necesitamos un gobierno sumamente eficaz y eficiente capaz de implementar acciones paralelas vistas sólo en economías de guerra, un gobierno a la altura de circunstancias extraordinarias y únicas en nuestra historia.
Nos encontramos ante un reto mayúsculo para la humanidad, donde se pondrán a prueba la capacidad de todos los gobiernos a nivel mundial, quien actúe más rápido e inteligentemente tendrá mayor posibilidad de salir de recuperarse de la recesión económica más rápida de nuestra historia.
Esta es nuestra realidad, esta es nuestra nueva normalidad, la de la crisis continua y perpetua, esto apenas inicia.