#RepoGrafica Morelia se viste de feminismo con #YoSoyTodas
La lucha feminista en la actualidad trata de hacer visible el dolor que nos causa perder a una hermana, una madre o una amiga
STAFF/ Colab. Esp. Eliza Flores
¡Nilda somos todas! Una de las consignas que las mujeres gritaron en la marcha del pasado 8 de marzo. El caso de Nilda es sólo una de los miles de desapariciones no resueltas que existen en México. Son pocas las mujeres de la ciudad que no conocen el caso de la alumna de veterinaria. Carteles, estampas y grafitis de tinta rosa nos recuerdan que Nilda no marchó con nosotros.
¡Nos faltan muchas! Decía uno de los carteles en la marea de mujeres que caminaron, brincaron y danzaron por avenida Madero. Se veía venir este mar de letreros y también estaba previsto que muchas marcharon por primera vez y vendrían sin pancartas.
La noche anterior a la marcha se fabricaron doce cartelones, para recordar a las que ya no están con nosotras. Historias que todos conocemos, aunque no sepamos cuándo, a quién o en dónde ocurrieron, porque los feminicidios suceden todos los días desde hace tiempo, las historias que se cuentan son repetidamente la misma.
Estefanía, Fátima, el caso de una bebé en Oaxaca, Alicia madre de Alessandra y Loreto; Jimena, Janet, el caso de una adolescente de 15 años en la Ciudad de México; Yuki, Ana Daniela, Ivonne madre de Fernanda, Laura, y Sheila. Son tan sólo quince mujeres con historias que terminaron en feminicidio.
El pequeño letrero más usado por las chicas fue el de Fátima, el caso reciente de la pequeña aún se siente presente; sin embargo, este letrero no era por quien todos tenemos en mente; esta pancarta es por Fátima, una niña que hace 5 años, tres vecinos la violaron y la asesinaron. Para ellos fue muy sencillo interceptarla cuando regresaba de la secundaria. Dos de ellos podrían salir libres.
Por Yuki se lee en otro de los letreros, una chica que desapareció el 6 de julio del 2000, hace ya casi 20 años, su familia aún la busca. El 25 de enero de este año, su hermana compartió en redes sociales la foto de Yuki junto a un letrero de “Se Busca”, esto para hacer visible un caso que para las autoridades quedó en el olvido.
Por Ana Daniela, su ex novio entró a su cuarto y la asfixió. Así una historia muy corta, que se repite en muchos rincones del país. Morir en manos del ex novio no es cosa del otro mundo.
La pancarta de Alicia, Alessandra y Loreto se levantó varias veces, sin imaginar que sería una de las historias más atroces dentro de los letreritos. José López Bautista, estranguló y mutiló a su esposa Alicia, después fue tras sus dos hijas; el ex policía cometió actos de canibalismo. Un caso que no tuvo el impacto social como el feminicidio de Ingrid.
Por Jimena y por todos los casos similares a los de ella, quien fue violada y asesinada por dos hermanos en «una combi». Por todas las niñas del país que han sido ultrajadas y finadas en un transporte público. Otra de las historias más recurrentes entre jovencitas.
Hoy, mañana y los días siguientes las cifras de feminicidio, asesinatos, violaciones y desapariciones crecerán, parece imparable la violencia contra la mujer. La lucha feminista en la actualidad trata de hacer visible el dolor que nos causa perder a una hermana, una madre o una amiga, contrario a la lucha del siglo anterior que buscaba la igualdad de derechos.
