STAFF/Marina Alejandra Martínez
El arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, reconoció que el Gobierno del Estado se encuentra rebasado ante la violencia que azota a Michoacán, lo cual evidencia que la estrategia de seguridad ha resultado fallida.
Durante su tradicional conferencia dominical previa a la celebración litúrgica, Garfias Merlos expresó su anhelo por el restablecimiento de la justicia, aunque sin emitir posicionamientos contundentes contra las autoridades.
El jerarca eclesiástico insistió en su ya habitual llamado a la paz y pidió “respaldar el esfuerzo” que realizan las autoridades para restablecer la calma en la entidad, esto luego del asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez, quien fue ejecutado de siete disparos durante el festejo de velas en la plaza pública del municipio.
“En muchas situaciones podremos hablar, como se plantea, de que está rebasado el gobierno y de que la estrategia está equivocada, pero junto a eso, entre más podamos mantenernos unidos en una buena relación y coordinación, podremos responder al desafío que nos presenta esta realidad”, indicó el arzobispo.
En ese contexto, reiteró que seguirá haciendo “el llamado desafiante para la construcción de la paz”, pese al clima de inseguridad que prevalece en el Estado.
“El gobierno, en sus diferentes niveles, está haciendo su esfuerzo, ellos dan sus informes, hay que darles la credibilidad pertinente, creo que los demás, como líderes religiosos, la sociedad civil y medios de comunicación, estamos en el esfuerzo de construir la paz, y es lo que yo estoy planteando”, señaló.
Frente a la ola de asesinatos y el temor generalizado, Garfias Merlos aseguró no sentirse impotente, pues recordó que la Iglesia católica mantiene en funcionamiento 36 centros de escucha para víctimas de violencia, donde se atienden más de 3 mil personas.
Además, mencionó la Casa del Artesano, que brinda atención a 150 personas con adicciones, y diez estrategias integrales para asistir a víctimas, desde menores hasta adultos mayores.
