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Cerca de 10 horas permaneció José en una casa luego de morir, nadie quería levantar el cuerpo porque el adulto mayor no tenía dinero para pagar y nadie más quería cubrir el costo de los servicios funerarios.
El hombre de más de 70 años de edad era indigente y solía dormir en una casa abandonada ubicada sobre las calles Cordero y Coahuila, Sonora.
Vecinos de la colonia reportaron a las autoridades que José había fallecido dentro de la vivienda. Peritos determinaron que su muerte fue por causas naturales.
Sin embargo, cuando el Servicio Médico Forense se retiró del lugar ya que ninguna casa funeraria llegó para recoger el cuerpo del septuagenario.
Y es que no había nadie que pudiera pagar la cuenta de los servicios funerarios para despedir a José.
Durante alrededor de 10 días el cuerpo permaneció en el lugar donde lo encontraron ya sin vida, con una pierna amputada y la otra gangrenada. Con el paso del tiempo comenzó a entrar en estado de descomposición.
Finalmente, el regidor Sergio Lamarque tuvo conocimiento del caso gracias a los vecinos y cubrió los gastos para que José fuera sepultado como es debido.
