STAFF/Alejandro Amado
En un debate que lamentablemente no tuvo las emociones del que se realizó en Monterrey, los candidatos al Ayuntamiento de Morelia se midieron nuevamente en un debate, ahora organizado por el Grupo Morelos AC que ganó ante el Tribunal Electoral del Estado de Michoacán (TEEM) el derecho a realizar el debate que de acuerdo a los tiempos del Instituto Electoral de Michoacán (IEM) ya no era posible.
El formato fue algo acartonado y en pocas veces se vio que los periodistas atajaran a los candidatos que eludían responder preguntas, como cuando a Daniela de los Santos (PRI) se le preguntó si integraría a alguno de los candidatos a su equipo de trabajo y se salió por la tangente al encasillarse en que su gobierno tendría participación ciudadana.
La priísta evita entrar en polémica ante provocaciones como el de Fausto Vallejo (PES), quien insistía en que De los Santos podría dar testimonio de su buen gobierno municipal del que la priísta formó parte del Cabildo, o ante la insistencia de Constantino Ortiz (PVEM) de que un miembro de su partido, al que nunca llama por su nombre, tiene plantaciones de aguacate en Morelia.
Y es que el candidato del PVEM parece que comió gallo pues hasta sacó sus cuentas de cuánto tiempo llevan sus contrincantes viviendo del erario, llegando a la suma de 87 años, aunque no escapó a la balconeada que le dio Vallejo Figueroa en el sentido de que debe tres años de renta a Enrique Villalón, situación que el candidato del Verde negó.
También para el independiente tuvo Constantino Ortiz, quien reclamó a Martínez Alcázar el actuar de la Policía que tanto presume en el zafarrancho que protagonizó este domingo con ciudadanos que intentaban evitar la detención de un joven que patinaba en la Plaza de Armas.
Por su parte, Carlos Quintana Martínez (PAN-PR-MC), mostró una gráfica sobre el crecimiento del gasto en el Capítulo 1000, relativo al gasto corriente, que ha tenido, sostuvo, el gobierno independiente. Cuestionado sobre su declaración patrimonial dijo no hacerla pública porque así es a normativa del Congreso pero aceptó tener seis propiedades y participación en una sociedad mercantil. Dijo o tener problema en hacer públicas sus declaraciones patrimoniales. Sobre seguridad volvió a asegurar que introduciría drones pese a haber recibido memes tras la propuesta.
El independiente sacó su carta fuerte al acusar al panista de beneficiarse de filtraciones realizadas, según él, por la hermana de la candidata al Senado por el Frente, Alma Mireya González, desde su puesto al interior de la Auditoría Superior de Michoacán (ASM). El panista lo retó a presentar una denuncia, pero al cuestionarle en entrevista si lo hará, Martínez Alcázar dijo que lo analizan todavía.
Por su parte el candidato de Morena-PT, Raúl Morón, sacaba a relucir a su candidato presidencial o a quienes tendrían un lugar en su gabinete cada vez que se le preguntaba cómo le haría para lograr sus promesas de campaña. “Andrés Manuel esto, Andrés Manuel aquello”, se escuchaba reiteradamente en sus participaciones, entre lo destacado dijo que buscaría sacar al tren de Morelia.
Quien de plano se lució con los disparates fue el candidato del Panal, César Santoyo, quien al preguntarle sobre la seguridad escaló las dimensiones del problema hasta responsabilizar al crimen organizado de la desaparecida Unión Soviética o del sur del continente de lo que ocurre en Morelia. También desvarió en su propuesta de construir puentes y pasos a desnivel en los cruces del tren, mismos que prometió hasta en la colonia Santiaguito, en donde no cruza el tren. Tampoco supo responder cómo atacaría el problema de la trata de personas.
Lo que habría que destacar es que las preguntas ciudadanas en efecto lo eran, pues salieron a buscar personas comunes, principalmente en mercados y en Villa del Pedregal, a diferencia de las preguntas ciudadanas del debate organizado por Coparmex en donde prácticamente todos eran estudiantes de universidades privadas que se obtuvieron por vía redes sociales.