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Una de cada cinco mexicanas comienza su vida conyugal antes de cumplir los 18 años, y la mayoría de ellas son jóvenes indígenas de Chiapas, Guerrero y Veracruz, revela la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2014, cuyos resultados apenas a estas fechas se dan a conocer al público.
Según dicha medición, el 15.4% de mujeres entre los 20 y 24 años ya son madres y de ese grupo el 3.7 % iniciaron una vida en pareja antes de los 15 años, por lo que se señala que la tendencia a las uniones tempranas no ha cambiado, pues existen ocho millones de mujeres entre los 15 y 54 años que se sumaron a la vida conyugal antes de los 18 años.
Derivado esta situación la ONU Mujeres realizará la Campaña 2015 “Únete para prevenir y eliminar la unión temprana y el matrimonio de las niñas”, misma que dará inicio el próximo 25 de noviembre cuando se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y culminará el 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos.
El objetivo de ONU Mujeres es lograr la armonización legal en todos los estados del país para que se establezcan los 18 años como la edad mínima para el matrimonio, de acuerdo con los instrumentos internacionales y al marco jurídico nacional.
El matrimonio de niñas y las uniones tempranas, remarcó el organismo internacional, constituyen una violación a sus derechos humanos y son consideradas por la ONU como “prácticas nocivas que afectan gravemente la vida, la salud, la educación y la integridad de las niñas”, y subrayó, impacta su desarrollo futuro y el de sus familias e incrementa la discriminación y la violencia contra ellas.
ONU Mujeres indica que el matrimonio de niñas tiene sus raíces en la discriminación de género y tiene múltiples consecuencias: la deserción escolar, el embarazo prematuro, la mortalidad materna, la transmisión intergeneracional de la pobreza y en general la limitación a las oportunidades de vida de las niñas y adolescentes.
*Con info de AGENCIAS
