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Esta es la señora Claudia, quien en compañía de su esposo, una hermana y un par de voluntari@s que viven por temporadas con ella en el refugio “Los Milagros”, mantiene un lugar a donde cualquier persona de bajos recursos que tiene un paciente internado en el Hospital Infantil o el Hospital Civil de Morelia; puede ir y encontrar un hogar que lo ayudará a sobrevivir la noche de angustia.
El Refugio “Los Milagros” está ubicado a tan solo una cuadra y media de los hospitales, en la calle Gertrudis Bocanegra #436, colonia Centro, y le ofrece diariamente baños, regaderas con agua caliente, una cama, tendido, colchón inflable o un espacio digno para dormir a cualquier persona que lo solicite, sin preguntar condiciones económicas ni hacer ningún distintivo y con la única petición de que muestren un certificado que indique que tienen un paciente en algún nosocomio público.
El lugar actualmente da refugio a 40 personas, sin embargo en solo tres cuartos y espacios como sala, comedor, un estudio, descanso en el segundo piso y hasta en la cochera hay acomodadas literas y colchones donde albergan hasta de 130 a 150 personas, por lo que doña Claudia dijo que ante la afluencia del lugar se han tenido que ver en la necesidad de que a quienes pasan muchos días ahí, se les pida una cooperación de 10 pesos para abastecerse.
La comida no se les puede proporcionar a todas las personas diariamente ya que no existe suficientes alimentos, sin embargo por lo menos en “Los Milagros” se compran de hasta 2 garrafones de agua por día ya que quienes pasan la noche ahí aprovechan y llenan botellas para llevárselas y aguantar las largas jornadas de espera afuera de los hospitales.
Y entonces para pagar la luz, agua, gas y hasta comida, ¿Cómo le hacen? ¿Reciben apoyos económicos o en especie del gobierno o alguna asociación?, se le preguntó a la señora Claudia, a lo que ella con una voz de desánimo respondió “¡Uy no! Muchas veces le pedimos al gobierno y hasta nos llegamos a plantar ahí en el centro frente a Palacio de Gobierno haciendo huelga de hambre y ni nos hicieron caso, entonces ya ni les pedimos nada porque sabemos que no nos atenderán, ya ve como son. Entonces nos mantenemos de lo que gana mi esposo lavando coches todo el día aquí afuera, los vecinos de atrás nos pasan la luz y les aportamos una parte del dinero del recibo y pues de las pocas donaciones que recibimos”.
Asimismo, nos reveló que antes la casa ya se utilizaba como refugio y el Ayuntamento de Morelia pagaba una renta de 20 mil pesos y ese era el único apoyo que se recibía, sin embargo dejaron de pagar ya que llegaron otras personas que aseguraron eran los dueños y se acordó no pagar renta alguna, por lo que desde hace dos años y medio ella y su familia se encargan de proporcionarle a la gente todos los servicios y un lugar apto para que puedan llegar a recargar pilas por unas horas o días, si es necesario.
El doctor Francisco del Toro ha sido de gran ayuda, ya que él es quien los representa e invita a sus alumnos de la Universidad Michoacana a que donen alimentos o cobijas que son tan necesarias para el lugar, nos afirma la señora mientras nos acercamos a su cocina y logramos ver una alacena casi vacía.
“Aquí vivimos también de lo que nos da la gente y no podemos ponernos delicados porque tenemos necesidad y nadie más nos da, hubo una vez en la que nos dieron una caja de puras ‘desas’ sopas maruchan y solo sopitas le dábamos a la gente, desayunábamos, comíamos y cenábamos eso, pero yo les decía ¿No quieren otra sopita calientita? Y me decían ‘Ay no doña Claudia, ya no queremos de eso’, pero ni modo, hasta le di para llevar a gente que se iba a su comunidad el fin de semana, para que mínimo tuviera qué comer”.
El refugio “Los Milagros” tiene muchas carencias, faltan desde voluntarios que ayuden a hacer el aseo, hasta dinero y víveres para la gente de bajos recursos que acude para no pasar las noches en la calle, sin embargo tal parece ni la sociedad civil ni el gobierno están al tanto de este lugar y mucho menos de las necesidades que presenta.
Changoonga.com hizo una visita el pasado mes de marzo para conocer el lugar y platicar con los responsables de esta causa social y al constatar que “Los Milagros” es un espacio para gente que necesita de una ayuda para pasar el mal rato que les hacen vivir enfermedades de sus familiares o hasta propias; les hizo la entrega de alimentos no perecederos recolectados en su fiesta de 2do Aniversario el pasado 31 de enero, esperando que al menos esa alacena que desde nuestra primer visita se veía casi vacía, tenga para dotar de alimentos al menos unos días a la gente y el hambre no sea otra preocupación con la que deban lidiar.
