STAFF/Marina Alejandra Martínez
El Congreso del Estado instaló formalmente el segundo periodo legislativo de la 76 Legislatura en una sesión extraordinaria celebrada la madrugada de este lunes, marcada por un clamor unánime, restablecer la paz y la tranquilidad en Michoacán.
La urgencia de la exigencia se alimentó de los hechos violentos ocurridos horas antes, que obligaron a al menos cuatro municipios a cancelar sus festejos patrios.
En ese contexto, la mayoría de los legisladores demandó al gobierno federal y estatal el restablecimiento del orden.
El primero en intervenir fue el único legislador independiente, Alejandro Bautista Tafoya, quien solicitó un minuto de silencio por un policía caído en Uruapan.
Advirtió que, de no atenderse de inmediato la inseguridad, deberían cancelarse las celebraciones del 15 de septiembre en la capital del Estado.
“Exhorto desde esta tribuna para que se garantice la seguridad de los michoacanos o, de lo contrario, que sean canceladas las fiestas patrias por el bien de la ciudadanía como ya lo están haciendo Peribán, Zinapécuaro y Uruapan”, manifestó.
Antonio Carreño Sosa, de Movimiento Ciudadano (MC), sostuvo que “más de un 90 por ciento de los delitos en Michoacán no se denunció y de los pocos que llegan al ministerio público apenas una fracción tiene sentencia”.
Acusó que este fracaso obedece a un “diseño institucional captado por intereses políticos o ministerios públicos sin recursos y recursos judiciales lentos y revictimizantes”.
Añadió que la reforma judicial en curso busca un poder judicial dócil “que no incomode un régimen y que responda a otros intereses”.
Desde el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Adriana Campos, y de Acción Nacional (PAN), Jesús Salas Valencia, reprocharon las promesas incumplidas del gobierno federal y la ausencia de políticas públicas eficaces.
En contraste, Reyes Galindo del Partido del Trabajo (PT), Sandra Arreola del Verde Ecologista de México (PVEM) y Belinda Iturbide de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) aprovecharon la tribuna para aplaudir las acciones del Ejecutivo federal.
Por su parte, Conrado Paz Torres, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y Marco Polo Aguirre Chávez, de la representación parlamentaria, se limitaron a discursos protocolarios, celebrando el primer año legislativo sin posicionamientos políticos de fondo.
