Aburridamente Criminal Empate A Cero Entre Atlas y Monarcas

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Si de algo sirvió que Atlas y Monarcas intentarán jugar al fútbol esta noche en el estadio Jalisco, fue para repartirse puntos, y nada más, tras e futbolístico. El punto, a final de cuentas, sirve para el objetivo principal del Atlas pero los michoacanos complican su pase a Liguilla.
Los abucheos hablaron por sí mismos de lo que fueron los 90 minutos. Porque si bien hay encuentros aburridos que algunos técnicos modernos justifican afirmando que son «ricos» para el análisis, este no fue tal. La primera parte de este partido es un ejemplo de esta teoría tan propia del balompié moderno. Atlas y Morelia se encierran en la jaula del «equilibrio de fuerzas». Ninguno es capaz de ejercer dominio.
Así, los minutos se van entre tibios intentos de ofender, férreo deseo de no permitir gol y escasas, muy escasas emociones en los arcos, para decepción de la tribuna del Estadio Jalisco, que presenta una buena entrada, no tanto porque el duelo resulte atractivo, sino porque el boleto de esta noche es la garantía para adquirir primero las entradas del Clásico Tapatío que se disputará el 20 de abril.
Morelia lo intentó en un par de ocasiones. Demasiada timidez para pensar que en realidad hay intención de ofender. Un disparo de José María Cárdenas que controla el arquero Miguel Pinto, al ‘8. Y un derechazo del ex rojinegro, Héctor Mancilla, que pasa por un costado del marco local, tres minutos más tarde.
En tanto elAtlas anda por las mismas. Está lejos de ser el de otras noches en el Coloso de la Calzada Independencia. Es apenas la sombra del equipo que ha logrado alejarse del descenso hasta instalarse en la segunda posición de la clasificación. Su futbol dista del que ha practicado en el Clausura 2013 con Tomás Boy en la banca.
Sus avances mueren casi siempre en medio campo. Cuando llega más allá, le falta claridad y profundidad. No son los Zorros de siempre. Para aproximarse con peligro, recurren al balón parado. En un tiro libre por fin se nota la presencia de Federico Vilar en el terreno de juego.
El primer tiempo no ofreció más. El «análisis táctico» no es suficiente para encontrar en la cancha más emociones. El veredicto de los aficionados es unánime: abucheos para despedir a los equipos al irse al descanso.
Para el complemente, los equipos sale más sueltos. Sólo un poco. No lo suficiente para incrementar la emotividad del encuentro. Los dos se ven cómodos con el empate, pero hacen algún intento por conseguir algo más.
Entonces, las últimas emociones se quedan apenas en eso. El centro por el costado izquierdo es tocado por Omar Bravo, que deja el esférico a Ricardo Bocanegra, cuyo potente disparo resulta demasiado cruzado, al ’83. Y siete minutos más tarde, el tiro libre de José María Cárdenas pasa por encima de la barrera, pero no alcanza a bajar lo suficiente. Se va por encima.
Silbatazo final. Termina un encuentro sin goles. Escasas emociones. Abucheos. Pero Atlas cumple de cierta manera con su cometido. Suma y en la lucha por la salvación se aleja ahora a nueve puntos del Querétaro, cuando restan sólo 12 por disputar.
*tomado de centraldeportiva.com