STAFF/Marina Alejandra Martínez
Michoacán posee una de las joyas naturales más impresionantes del país: 43 playas a lo largo de más de 200 kilómetros en el océano Pacífico, muchas de ellas vírgenes y rodeadas de exuberante vegetación, cultura ancestral y escenarios únicos.
Sin embargo, a pesar de este invaluable recurso, la falta de promoción ha impedido que la costa michoacana reciba el turismo que merece.
El diputado Abraham Espinoza Villa, señaló que el litoral michoacano debe ser impulsado como un destino turístico sustentable, resaltando su gastronomía, sus tradiciones artesanales y su historia, sin dejar de lado sus múltiples atractivos naturales.
Ante este panorama, se ha propuesto la estrategia «En Michoacán: las rutas, la costa», que busca proyectar la riqueza de estas playas a nivel nacional e internacional.
«El turismo en esta zona no es solo una oportunidad de desarrollo económico si una necesidad fundamental para el sustento de más de 80 mil habitantes, quienes han encontrado en esta actividad una de sus principales fuentes de ingreso, desde hoteleros y restauranteros hasta artesanos y pescadores, cientos de familias dependen directamente de la llegada de turistas a la región», enfatizó.
En la región, destacan destinos como Aquila, donde existen 28 playas enclavadas en comunidades indígenas como Ostula, El Coire y Pomaro, que han conservado intacta su identidad cultural.
En Coahuayana, los turistas pueden disfrutar de tres playas idóneas para la relajación, mientras que Lázaro Cárdenas ofrece 12 playas perfectas para el ecoturismo y el deporte.
Más allá del sol y la arena, afirmó que la costa michoacana tiene el potencial de convertirse en un referente del turismo de aventura y naturaleza.
Entre las actividades que podrían atraer visitantes están el snorkel en aguas cristalinas, torneos de surf y triatlón, campamentos tortugueros, observación de cocodrilos, festivales de arena, competencias de voleibol y pesca, y exhibiciones de cocina tradicional y artesanías.
Espinoza Villa, urgió a que se implementen estrategias publicitarias en medios nacionales e internacionales, además de reforzar la presencia digital de la región en redes sociales y plataformas turísticas.
También propuso la realización de eventos promocionales y ferias culturales en otras ciudades del país para despertar el interés de nuevos visitantes.