STAFF/ Marcio Hernández
El desabasto de combustible se hace muy evidente en varios municipios de la entidad, más en los que cuentan con pocas estaciones de servicio.
En el municipio de Jiquilpan, por ejemplo, hay largas filas de personas esperando poder comprar el combustible, con más de 100 personas formadas portando garrafas y bidones para ser llenados, en medio de especulaciones acerca de un excesivo incremento en el precio, lo cual ha dado pie a pensar que muchos están reteniendo el derivado del petróleo.
De momento la versión oficial del gobernador de Michoacán Silvano Aureoles Conejo es que se trata «de un problema de logística» por parte de la paraestatal, mientras que Pemex a través de Roberto Revilla, director de logística de la empresa aseveró que en 72 horas se estará normalizando el suministro, argumentando que las tomas ilegales son el factor que ha contribuido al desabasto de los últimos días.