STAFF/Marina Alejandra Martínez
Guillermo Valencia Reyes, dirigente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), calificó como delincuentes y malhechores a los normalistas que, recurren a actos vandálicos y delictivos durante sus manifestaciones.
En conferencia de prensa, el líder priísta, afirmó, su respaldo a cualquier cuerpo policíaco, sin importar el nivel de gobierno, que se atreva a contener este tipo de acciones vandálicas.
«Quien conduce un vehículo con reporte de robo, el delito es receptación y pues obviamente es un delincuente, yo soy uno de los que así los nombra en redes sociales y hay que saber diferenciar, entre un estudiante que, hay muchos estudiantes normalistas muy buenos elementos, pero, hay unos otros que, por culpa de ellos, la mala fama, son delincuentes, es la realidad y creo que, la policía de Morelia, hizo su trabajo, al perseguir un vehículo con reporte de robo, hizo su labor», manifestó.
El también diputado local, destacó que, la policía de Morelia, actuó de manera correcta al enfrentarse y detener a algunos normalistas, asegurando que, Morelia y el Poder Judicial, han sido rehenes de los normalistas de Tiripetío, quienes secuestran camiones de pasajeros y mercancías de tiendas y empresas, dañan comercios y pocas veces son detenidos.
Además, denunció que cuando estos jóvenes son capturados, los jueces los liberan casi de inmediato.
Al ser cuestionado sobre posibles represalias de los normalistas, por sus opiniones emitidas y que, podría derivar en que, agredan el inmueble, Valencia Reyes, descartó el temor y declaró que, está protegido por el grupo Revolución Social, dispuesto a enfrentar a los normalistas.
«Tengo unos amigos que se llaman Revolución Social, les echo un grito, se dejan venir rápido, yo no puedo hacer nada, pero, mis compañeros y mis amigos, también son bravos, nada más que ellos respetan la ley y utilizan su fuerza para hacer valer la ley y luchar por las víctimas, así que si lo quieren intentar», ironizó.
Incluso comparó a los normalistas con la delincuencia organizada, al actuar de una forma similar, al parar vehículos a media carretera para incendiarlos, dejando en completa indefensión a la sociedad.