Recuperando la utopía: Poder y principios
Escribe: Roberto Pantoja Arzola
Mucho se ha dicho acerca de la lógica maquiavélica de que el fin justifica los medios y que esto es válido al menos en la política. Pero en nuestro movimiento, en el humanismo mexicano que está construyendo nuestra cuarta transformación, hemos empezado a aprender que los principios están por delante de los fines.
Después de 30 años de lucha, de haber enfrentado fraudes electorales, de haber sido humillados por una guerra sucia orquestada desde el poder político y económico, después de tener bajo nuestros hombros muertos, sangre y dolor; lo peor que podríamos hacer es imitar a nuestras némesis.
Ahora que está a la vuelta de la esquina la redefinición del poder político en el país, de cara al proceso electoral que se vivirá en el próximo 2024, renace el debate sobre de si es válido o no adjudicarse de cualquier medio, compromiso o componenda, a fin de colocarse al frente de este movimiento que legítimamente representa los intereses de una mayoría del pueblo mexicano.
Al menos por lo que tiene que ver con el presidente López Obrador, él ha dejado en claro que el fin no justifica los medios. De forma reiterada ha hecho un llamado público para que las llamadas corcholatas y todo aquel personaje que tenga aspiraciones políticas, privilegio el contacto con los ciudadanos y deje cualquier encargo público que tenga bajo su responsabilidad. El aspirar a posiciones políticas teniendo un mandato ciudadano a cuestas, significa en efecto una traición al pueblo.
Hemos llegado a consolidarnos como fuerza política mayoritaria en el país, gracias al ejemplo de nuestro presidente López Obrador quien ha colocado a la moral y a los principios como un imperativo ético en el servicio público. Por encima del cargo está el encargo, por encima del entredicho está la verdad, más allá de la coyuntura está el juicio de la historia. Así lo entendemos todos los que dimos el paso al frente hace décadas junto con nuestro dirigente del movimiento.
Está claro que en el país no tendremos instituciones virtuosas si no existen ciudadanos que abracen a la verdad, a la ética, a la moral, a los principios, a las convicciones, a la familia y al pueblo; antes que sus aspiraciones e intereses por muy legítimos que estos sean. Estamos pues enfrentando una batalla en la que no solo está en juego una elección, deberemos de decidir si transitamos por el camino de los principios o si hacemos como que estos nos estorban para llegar a la descarnada y vil lucha por el poder.
Roberto Pantoja Arzola es titular de la Delegación de la Secretaría de Bienestar del Gobierno de México en el estado de Michoacán de Ocampo desde el 2018.
Del 2015 al 2018 se desempeñó como presidente del Comité Ejecutivo Estatal de Morena en Michoacán.
Abogado, egresado de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) y Maestro en Docencia e Investigación por la Universidad Santander.