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En el estado de Nuevo León un bebé de apenas un mes de nacido murió debido al COVID-19 y a una cardiopatía compleja, que afectaba los principales vasos sanguíneos del corazón del pequeño.
“Era un bebé que tenía una enfermedad del corazón, que nosotros llamamos cardiopatía compleja. Son enfermedades muy complejas en los niños que impiden que el corazón bombee sangre oxigenada a todo su organismo y si a ello le agregamos una infección por COVID pues definitivamente el pronóstico del paciente iba a ser malo”, indicó Alma Rosa Marroquín, quien es titular de la dependencia de salud.
Y es que durante la rueda de prensa que se llevó a cabo durante este fin de semana, la titular Alma Marroquin informo que del 3 al 5 de febrero se habían tenido un total de 86 defunciones a causa de COVID-19, saliendo entre esta cifra, el caso del recién nacido.
Alma Rosa también específico que las enfermedades cardiacas en los menores siempre son un tema complicado de tratar, y pocas veces pueden recibir un tratamiento quirúrgico, sin embargo, la situación del bebé que falleció era complicada.
