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La Procuraduría General de Justicia del Estado de Michoacán obtuvo sentencia condenatoria de 20 años de prisión en contra de una persona del sexo masculino responsable del delito de Homicidio calificado, ilícito perpetrado en el año 2013 en esta ciudad en agravio de un trabajador de la Secretaría de Educación en el Estado (SEE).
El Juez de la causa resolvió sentenciar a José Jahzeel “N” quien de acuerdo a pruebas presentadas por el agente del Ministerio Público, privó de la vida a la víctima identificada como Gustavo Arturo “N”, hechos registrados el 19 de enero de 2013 en un restaurante de la calle Juan José de Lejarza de la colonia Centro.
Durante el desarrollo de las investigaciones, se estableció que la víctima laboraba en la Secretaría de Educación en el Estado (SEE) y se encargaba de realizar los pagos a personal que trabajaba en la dependencia, sin embargo, en una ocasión a uno de los empleados no se le efectuó por cuestiones de trámites, situación que generó que dicha persona amenazara de muerte al ahora occiso.
Sin embargo, días después dos hijos del empleado inconforme se presentaron en un negocio del agraviado, lugar donde le exigieron que entregara el cheque correspondiente al salario de su padre, a lo cual la víctima les manifestó que no él no lo tenía, por lo que un determinado momento, el ahora sentenciado sacó un arma de fuego y se la pasó a su hermano quien la accionó en contra de Gustavo Arturo, mismo que fue trasladado a un nosocomio donde días después perdió la vida.
Derivado de lo anterior, se logró conocer la identidad de José Jahzeel “N”, por lo que se solicitó orden de aprehensión en su contra, la cual tiempo después fue cumplimentada por agentes policiales, quienes lo presentaron ante el Juez de la causa, mismo que luego de valorar las pruebas aportadas por el agente del Ministerio Público, resolvió sentenciarlo a 20 años de prisión por su responsabilidad en el delito de Homicidio calificado.
Con estas acciones la Procuraduría General de Justicia del Estado de Michoacán, refrenda su compromiso de mantener trabajos firmes para que ningún hecho ilícito quede impune.