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Este Domingo de Ramos las iglesias se observan con una gran afluencia de feligreses, quienes han ingresado a las iglesias con sus palmas tejidas, ramos de laureles y algunas otras plantas como manzanilla.
En las puertas de la Catedral de Morelia solo se observan a dos vendedoras de estás figurillas, una vende tejidos de Palma y la otra trae figuras ya elaboradas con tallos de trigo.
Al interior del recinto católico el sacerdote que ofició la misa dijo que «por cuestiones de la Pandemia no pasaría a bendecir las palmas una por una», por lo que pidió a los presentes levantarán sus ramos para ser bendecidos a la distancia.
En los alrededores de la Iglesia de San Francisco hay varias familias vendiendo las figuras de cristos de trigo, otras tantas siguen tejiendo la palma tradicional, en esta área incluso se ven niños aprendiendo el arte del tejido.
El Sacerdote de San Francisco es un tanto más alegre, él se paseó por la iglesia pidiendo a todos los asistentes levantaran y agitaran las palmas en el aire y comenzarán una danza simbólica, mientras se escuchaban alabanzas.
El Domingo de Ramos es una de las celebraciones previas a los Días Santos, este día se recuerda la entrada triunfante de Jesús a su tierra natal de Jerusalén, ocho días antes de ser sacrificado en la cruz.
