Seguimiento Público… ¿Y por qué no me acuerdo?
Los familiares y parientes alejados, en Michoacán es tierra de nadie, donde los grupos delincuenciales se disputan los territorios y donde emergen los grupos de autodefensa como la única forma de atacar al mal de males que cobra piso hasta por vender chicles.
By: Homero Lemus
“Quién hubiera pensado que un día que ha ido tan mal sería tan encantado”: Bruno Mars
Los pueblos se han convertido en lugares fantasma, Tacámbaro, Santa Clara, Uruapan, Pátzcuaro, Peribán, Los Reyes, Zamora, Lázaro Cárdenas, Apatzingán son zonas en las que solo las fuerzas de José Manuel Mireles Valverde, Hipólito Mora y Papá “Pitufo” tienen el derecho de andarse paseando.
Las personas dejaron de visitar recintos culturales, parques, museos, zonas ecológicas de recreación y entretenimiento, incluso algunos hoteles tuvieron que cesar sus actividades (Sin Embargo, marzo 09, 2014).
Era la realidad. El miedo de visitar cualquier zona del estado por el temor de ser relacionado con algún cártel era la realidad para los turistas, las placas de los vehículos de otros estados no eran bien vistas.
Así pasaron los meses con el cierre del 37 por ciento de los hoteles que cerraron sus puertas según datos de la Asociación de Hoteles y Moteles del Estado de Michoacán Asociación Civil (AHMEMAC).
Así, lugares vacíos, sin turistas, y escasos eventos traídos por el comisionado Alfredo Castillo Cervantes, quien hacia acto de presencia en conciertos como de Ricky Martin o Ricardo Arjona, vislumbraban un Michoacán donde no se podía “comer unos tacos a las 3 de la mañana, era ya el 2015.
Hoy, apenas cinco años después la realidad es otra, pero la memoria es tan corta que no nos acordamos. Ahora hemos podido ver cómo los turistas nacionales y extranjeros han regresado a Michoacán.
Lugares como Zitácuaro, Ocampo, Pátzcuaro, Tzintzuntzan, Zamora, Puruándiro, Lázaro Cárdenas y la zona costera han ido recuperando paulatinamente los visitantes.
Es cierto, aún hay zonas y regiones donde los hechos marcan ese conflicto entre grupos delincuenciales.
La memoria tan corta nos hace ver por momentos que nada ha cambiado, que seguimos igual, que la gente no nos visita pero la realidad es otra.
Aún con episodios difíciles, con sucesos que marcan, con guerras que no son de las y los michoacanos, y con una fortaleza que es mayor a cualquier dificultad Michoacán está de pie.
Y a quienes a fuerza nos quieran meter en esa misma bolsa, que no se les olvide de dónde venimos, dónde estábamos y quiénes fueron los responsables, porque muchos de ellos nos volverán a pedir su confianza en los próximos meses y no nos preguntemos “y por qué no me acuerdo”.
@homerolemus10
POR TRATARSE DE UN ESPACIO EDITORIAL, CHANGOONGA.COM NO SE HACE RESPONSABLE DEL CONTENIDO DE ESTE TEXTO QUE SÓLO REFLEJA EL PUNTO DE VISTA PERSONAL DE QUIEN FIRMA