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Spike, un perrito criollo que apenas un mes había sido adoptado por locatorios del Mercado San Juan la Joya, en Iztapalapa, fue asesinado de manera cruel por un carnicero, identificado como Antonio Hernández, quien acuchilló, degolló y colgó al can para después arrojarlo a un basurero donde agonizó hasta morir.
El incidente se registró el jueves de la semana pasada en las inmediaciones de dicho mercado a donde el can llegó y fue adoptado por los locatarios. Al respecto del caso se sabe que los hijos de los comerciantes jugaban con el animal, sin que representara un peligro para nadie.
Sin embargo Antonio Hernández, quien tiene una carnicería en el lugar, estuvo en desacuerdo desde el principio con que se le alimentara. Los reportes de lo acontecido señalan que el día del ataque, algunos niños molestaron al perro, el cual era una cruza de pit bull.
El animal se enojó cuando lo golpearon con un palo y soltó una mordida a uno de los menores, sin causarle daño. Con ese pretexto, el carnicero tomó uno de sus utensilios, acuchilló al perro y lo degolló enfrente de los menores, en tanto que su hijastra lo ayudó a colgarlo de un gancho, ante lo cual los lamentos de Spike alertaron a algunos locatarios y vecinos de lo que había ocurrido.
En principio el carnicero trató de ocultar la evidencia del crimen arrojando el cuerpo del can al basurero del mercado, según se lee en la carpeta de investigación CI- FEDAPUR/A/UI-3C/D/001115/12-2019. El comerciante y su hijastra no fueron detenidos porque no hubo flagrancia, no obstante ambos son investigados ya que este tipo de crimen está penalizado hasta con dos años de cárcel.
La asociación protectora de animales Mundo Patitas tomó conocimiento del caso, el cual denunció ante la Fiscalía Especializada en Delitos Ambientales y Protección Urbana (Fedapur), donde ya se había iniciado un expediente de oficio.
