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Apenas el día de ayer la Procuraduría General de Justicia (PGJ) capitalina dio a conocer que el sacerdote Francisco Javier mató a Leonardo Avendaño como parte de un presunto juego sexual, salió a la luz su supuesto modus operandi del religioso para tener sexo con chavos.
Se sabe que el sacerdote y Leonardo estuvieron juntos cerca de 4 horas en la iglesia de Cristo Salvador, pero que el juego de estrangulamiento se dio en una casa de la colonia Héroes de 1910, en la alcaldía de Tlalpan.
Según medio Radiofórmula, el religioso también se habría involucrado sexualmente con otros hombres, que al igual que Leonardo formaban parte de la comunidad de la iglesia y Francisco los engañaba con temas en torno a asuntos eclesiásticos para acercarse a ellos.
Cabe señalar que hace unas semanas el cuerpo de Leonardo fue encontrado en la carretera Picacho-Ajusco con evidentes huellas de asfixia.
Pese a que se señala que el homicidio pudo ser dentro de un juego sexual, la titular de la procuraduría de CDMX asegura que no se trató de algo “pasional”