STAFF/ Fernando Palacios Colab. Esp.
El conflicto laboral al interior del hotel Virrey de Mendoza lejos de solucionarse, se agudiza, luego de que la semana pasada explotará la bomba mediática al revelarse maltratos del dueño, Ramón Toca Jr. en contra de los empleados, por diversas cuestiones contractuales entre ellas las propinas que la parte patronal quiere retener.
Luego de que la tarde de este viernes los empleados cerrarán el establecimiento acusando el despido del capitán de meseros Pablo Cortés, tras 26 años de servicio en el céntrico hotel de la capital michoacana, como muestra de solidaridad y ante la nula entrega de propinas hasta la fecha, los empleados se manifestaron una vez más a las afueras del hotel.
Y a esa manifestación arribó el máximo líder del transporte público, José Trinidad Martínez Pasalagua, pero en su calidad de dirigente estatal de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) de reciente creación y que busca aglutinar a diversos sindicatos para hacerle competencia y debilitar a la Confederación de Trabajadores de México (CTM) organismo que se supone, aglutina a los trabajadores del Virrey pero que acusan, se “vendió” en favor de la parte patronal.
“Estamos aquí para solidarizarnos con ellos, de parte de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México , vamos apoyar en lo que se deba, pues no se puede seguir en la misma posición que tienen los patrones, y se debe cambiar la situación, debe haber respeto a sus derechos que como trabajadores tienen” puntualizó Martínez Pasalagua acompañado de unos 20 transportistas que con pancartas se unieron a la manifestación de esta tarde.
Tras señalar que habrá apoyo de otros sindicatos agrupados en la CATEM, Pasalagua apuntó que pondrán un abogado a disposición de los trabajadores del hotel para dar la batalla legal en conjunto ante la Junta de Conciliación y Arbitraje.
Los empleados informaron este viernes a medios de comunicación la retención de propinas por parte del dueño y comenzaron a realizar paro de labores en el hotel, los empleados buscaron el diálogo para llegar a alguna resolución y fue así que el día domingo se firmó una minuta donde se aseguraba no habría represalias hacia los empleados que se mostraron inconformes.
En lo que va de la semana han sido despedidos seis trabajadores del hotel a pesar de la minuta firmada, se supondría que el abogado de los empleados, Ismael Ibarra Dávalos se reuniría con el abogado del dueño del hotel y con el dueño el día miércoles, sin embargo Ramón Toca no se presentó al encuentro, no hubo justificación alguna por la falta a esta reunión.