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“El gobierno de Aureoles se ve con una circunstancia no resuelta pues el crimen organizado y la violencia que aun prevalece hizo de Michoacán un foco de referencia ‘tristemente’ obligada, ya que fue en este Estado, que el expresidente Felipe Calderón tomo la decisión de reorientar recursos públicos y militar a un país como el nuestro con resultados francamente catastróficos», consideró en conferencia de prensa, la periodista Carmen Aristegui en la ciudad de Pátzcuaro, antes de recibir un reconocimiento por parte del municipio.
Afirmó que ante la grave situación de violencia y presencia del crimen organizado, Michoacán no se arregló como se esperaba, ya que ni con la llegada del “Virrey” Alfredo Castillo, enviado por Enrique Peña Nieto, los índices delictivos impactaron de manera positiva, pues los cotos de la delincuencia han “tomado literalmente el poder, usando la propia actividad económica”, ejemplificando el caso de los limoneros y los productores de aguacate, “donde hay incluso ya, control del mercado”.
Michoacán ha sido una entidad muy dolida, enfatizó la comunicadora, “muy lastimada”, sin embargo reconoció que es una Entidad “fantástica”, pero ha “estado muy marcada por este fenómeno de crimen, de violencia e impunidad” resaltó.
