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Luego de reportar su desaparición desde el pasado 3 de enero, el sacerdote Joaquín Hernández Sifuentes, de la diócesis de Saltillo, fue encontrado muerto.
La denuncia de su caso se hizo pública el pasado 7 de enero, y esta mañana la Procuraduría General de Justicia en Coahuila (PGJEC) informó que el automóvil del padre fue encontrado en Nuevo León.
Horas más tarde, a las 15:40, la Diócesis de Saltillo emitió un comunicado de prensa firmado por el obispo Raúl Vera López y el Vicario General, Gerardo Escareño, donde se confirma su muerte, sin emitir más detalles sobre el suceso ni la forma o las condiciones en que fue encontrado.
El cuerpo será velado el domingo 15 de enero en la capilla del Seminario Diocesano desde las 12 del mediodía hasta las 12 de la medianoche, según se informó en dicho comunicado.
La mañana del lunes, los restos serán trasladados a la Catedral del Saltillo para celebrar ahí el funeral a las 10 de la mañana.
