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El conflicto que vive esta comunidad indígena ubicada en el corazón de la Meseta Purhépecha, se ha recrudecido desde el pasado miércoles, al bloquear los accesos con barricadas y la retención de al menos una veintena de vehículos de diferentes empresas, entre ellos, seis autobuses de pasajeros. Este jueves los inconformes han incendiado dos autos y advierten con prenderle fuego a uno cada hora de no solucionar el gobierno del estado sus demandas.
Los habitantes del lugar exigen el reconocimiento de su policía conformada por personas del lugar ya que no confian en extraños. Han manifestado el desconocimiento del alcalde, Miguel Prado Morales, quien no ha podido tomar posesión del edificio municipal que está en poder de los habitantes de esa comunidad.
Está mañana los manifestantes incendiaron dos vehículos, propiedad de particulares; uno en la barricada de salida a Arantepakua y otro en la de Sevina.
La advertencia es en el sentido de que si el gobierno de Michoacán no da solución al conflicto, cada hora le prenderán fuego a un automotor o autobús de pasajeros. La región vive una tensa calma.
