Ventanean La 1ra Peda De Marco Fabián En El DF; El Jugador Se Dice Perseguido

STAFF / @michangonga

En su nueva vida como jugador del Cruz Azul, el mediocampista Marco Fabián  ya retomó viejas costumbres, pues pese a los esfuerzos de Cruz Azul por mantener controlada la vida nocturna del jugador, anoche se dio la primera escapada del jugador, en el antro la Choperia, ubicado en la avenida Insurgentes.

Fabián estuvo acompañado por dos jugadores más de la Máquina, el ‘Cata’ Domínguez y otro reconocido fiestero de la afición de Morelia, el ecuatoriano Joao Rojas quien en la capital michoacana dió muestras de su amor por la vida nocturna.

Testigos de la reunión de los fútbolistas señalaron que la misma subió de ambiente con las horas y los jugadores gritaban «shots, shots, lunes de perdición». El último en salir fue Marco, el cual, dicen presentes, estaba en un estado inconveniente acompañado de una mujer, la cual tuvo que manejar el auto de Fabián.

Al ser cuestionado al respecto el Presidente deportivo de La Máquina, Agustín Manzo indicó que no se trató de una fiesta en altas horas de la noche, pues todo terminó a las 23:30 hrs. aunado a que no ve mal que los jugadores salgan en su día libre, pues tienen derecho a divertirse como todas las demás personas: «Es un restaurante común y corriente donde estaba, tampoco es el Bar Bar en lunes», manifestó el directivo cementero en las instalaciones de La Noria.

Por su parte el jugador dió la cara para hablar de las fotos y se dijo tranquilo porque sólo fue a cenar, no a emborracharse como señala la persona que dio a conocer las imágenes.

«Quería aclarar que estoy tranquilo, ya lo hablé con Agustín Manzo y con Tena, me invitaron a cenar, como cualquier persona normal, lo que escriben ahí es una total mentira y esto ya se está pasando como están siguiendo mi vida privada. Quería dar la cara y aclarar, porque hoy entrené al ciento por ciento».

Expuso que se siente perseguido, pues se meten tanto en su vida privada que ya no lo dejan ni convivir con sus amigos: «Yo creo que un poco, de repente cansa; ahorita hablando con los compañeros ellos lo saben y cualquiera lo ha vivido, que cansa que se hable de este tema y no puedas ni salir de tu casa ni a cenar, que te invite un amigo y listo».