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De acuerdo a la Procuraduría General de Justicia de Jalisco, el día de ayer se encontraron 17 cadáveres en el límite de Michoacán y Jalisco, los cuerpos ya tenían varios días en descomposición.
Apilados, atados con cadenas, sus ojos cubiertos por cinta adhesiva, los cadáveres tenían impactos de arma de fuego mismos que fueron encontrados en la carretera libre Guadalajara-Morelia en el kilómetro 38. Las autoridades investigan que tal vez los casos de secuestro y desapariciones en Degollado, Uncitlán, Tototlán, Ocotlán y La Barca estén tengan relación con esta masacre.
El procurador general del estado de Jalisco, Tomás Coronado Olmos declaró la posibilidad de que los asesinatos hayan sido en el estado de Michoacán “En los límites con otros estados es más probable y más vulnerable hacer una acción y posteriormente dejar a las personas”.
Autoridades del Servicio Médico Forense se encuentra realizando las investigaciones pertinentes para determinar cómo ocurrieron los homicidios.
Con información y foto de El Universal.
