By: Eliza Flores

El magistrado Hector Octavio Morales, Presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado (STJE) ha hecho algunas declaraciones que la comunidad feminista consideran ser misoginas y machistas, ya que el Presidente quiere anteponer la historia del sufragio al derecho de paridad, esto frente a la iniciativa presentada por cinco diputados locales.

La iniciativa propone una reforma al artículo 16 de la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado de Michoacán, La cuál propone la rotación de la presidencia del Poder Judicial respetando la paridad de género, esto significa que un trienio sería precedido por un hombre y el siguiente trienio por una mujer.

El magistrado Octavio Morales declaró en una entrevista a la periodista Rebeca Hernández que las mujeres hacen menos carrera judicial probablemente por su condición de esposas y madres, son menos las mujeres las que participan en los concursos para jueces porque para ellas es complicado aceptar que las manden a municipios alejados de sus familias, por eso los hombres toman esos puestos.

Dichas declaraciones son delicadas frente a todo el movimiento feminista que crece en todo el mundo, tal vez para el magistrado es sencillo hablar de las situaciones que él considera frenan las carreras judiciales de las mujeres en el poder que él preside en el estado de Michoacán.

Tal parece que ha olvidado que sí hay, sí existen magistradas en el estado, y que es posible que en la próxima elección a la presidencia del Poder Judicial se pueda votar y elegir únicamente entre mujeres, sin embargo él considera que de ser aceptada la iniciativa y reformada la ley se violan los derechos de igualdad y paridad de género, ya que no se podrá votar por los hombres, y esto los deja fuera del proceso democrático para la elección del cargo.

La presidencia del STJE nunca ha sido ocupada por votación por una mujer, 215 presidentes varones desde 1824, las cuatro presidencias que ha tenido el Poder Judicial han sido por cargos de sustitución; por lo que es de suma importancia que la iniciativa sea estudiada y aceptada por el Poder Legislativo, lo que abriría la posibilidad a que las mujeres comiencen a ser votadas para ocupar cargos públicos que conlleven toma de decisiones.

La comunidad feminista además considera que, de ser aceptada esta ley, se avanzaría en “el cómo se castigaría a feminicidas, acosadores y abusadores sexuales” en los procesos judiciales en su contra. También daría perspectiva de género a la interpretación de las leyes estatales; por ejemplo las iniciativas que legalicen el aborto o por el contrario que lo castiguen penalmente, como ya se ha intentado. El Poder Judicial tiene en sus manos dar una interpretación.

En la actualidad hay un déficit de mujeres en la toma de decisiones del Poder Judicial en Michoacán: El Consejo del Poder Judicial está integrado por 3 hombres y 1 mujer. El Pleno del Supremo Tribunal de Justicia del Estado está integrado por 82% hombres magistrados y 18% mujeres magistradas. En Michoacán el 83% de los jueces son hombres y solo el 17% son mujeres.