Por si las moscas
Por SANDee
¿Recuerdas esos comerciales de World Vision en donde te piden apadrinar a un niño y la escena es desoladora? Sin duda es una imagen de alto impacto, y logra su objetivo, conmover al televidente el domingo en la mañana, justo cuando va a refinarse unos hot cakes con tocino. Auch.
Pero no es el hambre de los chavitos el tema de hoy. No, son las mendigas moscas que se les pegan en sus caritas lo que calienta, una cosa es la pobreza y otra es la higiene, puedes ser pobre, pero traer a tus hijitos limpios. ¿O no?
Las moscas han acompañado al ser humano a lo largo de su evolución, donde hay gente hay moscas, porque donde hay personas hay comida, basura y… caca. A las moscas les encanta vivir, comer y reproducirse en la inmundicia, después van y riegan su “calabaza” en comida y utensilios de uso cotidiano.
Todo lo que tocan las moscas contiene sus larvas, incluso las cacas que adornan focos y vidrios. Esta plaga domestica es peligrosa porque ya es tan cotidiana su presencia que mucha gente no llega a pensar que son dañinas, pero la ciencia las ve como transmisores de campilobacteriosis, amibiasis, lombrices, salmonella, disentería y eschericia coli, entre otras variedades de parásitos intestinales y por lo tanto, diarreas.
La cosa no para ahí, algunas especies de mosca causan ceguera, ya que al pararse en el área de los ojos les causa una infección que se conoce como tracoma, una infección que desde siempre ha existido en África, Oriente Medio y Asia, pero ya se han reportado casos en Latinoamérica y en Chiapas, ¡en nuestro México!
Según la Organización Mundial de la Salud, unos 84 millones de personas padecen la infección activa y unos 7 millones ya se quedaron ciegos por esta causa en el mundo. Las cifras en México son inciertas y no están actualizadas, el sector salud no las precisa, pero la organización Prevenir la Ceguera reporta unos 15 mil casos en el país, indígenas en su mayoría.
Pero regresando a los niños, que son la alegría de nuestros hogares y el futuro de la humanidad, es importante por ellos y por todos mantener la casa limpia, lavar trastes, barrer el piso, mantener la estufa sin comida y trapear con cloro. Evitar las moscas y el insecticida, pues.
Es importante enseñar a los chavitos a lavarse las manos y la cara, recuerda: andar chamagoso deprime y enferma, ¡por donde lo quieras ver! Y si no fuera mucho pedir, evita comer en puestos en donde se ve un enjambre negro para que no te “pegue seguidillo”, nomás por si las moscas.
Twitter: @SanDeeMolina
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