STAFF/ Margarita Arreola @Arreolamargui
Hoy, 20 de febrero, el volcán más ‘chavo’ del país, el orgullosamente michoacano, Paricutín, cumple 77 años, y aunque es poco probable y se requieren de múltiples estudios e investigación, no es imposible que nazca un hermano, derivado del enjambre sísmico que se ha sentido en los últimos días en la misma región de Uruapan.
Tan solo un reporte del Servicio Sismológico Nacional (SSM) y la Universidad Autónoma de México (UNAM) registran que del 5 de enero al 19 de febrero del 2020 hubo 3 mil 24 sismos en la región del Paricutín, siendo de 4.1 el de mayor magnitud.
Para Patricia Alarcón Chaires, especialista y coordinadora del laboratorio de ensayo sísmico de la Facultad de Ingeniería Civil de la Universidad Michoacana, estos sismos pueden tener muchas variantes y aunque la posibilidad de la formación de un nuevo volcán en la misma región del Paricutín es muy aventurada tampoco está descartada, sin embargo, se requieren mayores estudios.
Explicó que el fenómeno se puede deber al movimiento tectónico del magma que busca salir de alguna manera, pero eso no quiere decir que vaya a formarse un nuevo volcán, «no hay elementos para determinar eso, se tienen que identificar las razones, nadie puede asegurar nada aún, es muy atrevido hacer comparación con el Paricutín», expresó en entrevista telefónica.
Derivado de hasta los 300 sismos que se llegaron a sentir por día, múltiples especialistas dieron su postura como Hugo Delgado, director del Instituto de Geofísica de la UNAM, quien en una entrevista para el diario Milenio expuso.
«Lo que está pasando en Michoacán puede tener dos orígenes. Uno tectónico, es decir, una serie de fallas que están reacomodando las rocas de la corteza terrestre. La otra posibilidad es que este asociado con un fenómeno magmático o sea el ascenso de magma desde zonas profundas tratando de abrirse camino hacia la superficie, dejando dos opciones que no pase nada y otra que salga como un volcán», apuntó en entrevista para el diario de circulación nacional.
Como antecedente cabe señalar que cuando nació el Paricutín tuvo un primer sismo en 1941 y el mismo enero del 1943 se dejaron sentir varios movimientos telúricos que por fin abrieron la tierra y surgió el volcán el 20 de febrero de ese mismo año a los pies del campesino Dionisio Pulido, quien trabajaba su parcela.
Este volcán es considerado el más joven de América Latina, es el único del que se retiene registro desde su nacimiento el 20 de febrero de 1943 hasta su extinción en 1952, durando 9 años activo y sepultando a los pueblos de San Juan Parangaricutiro y Paricutín, además de contar con un acta de nacimiento donde se consta la fecha y hora del acontecimiento.
El Paricutín es considerado un volcán monogenético, es decir que solo hace erupción una vez, por lo que es más probable que nazca un nuevo volcán a que nuevamente haga erupción uno de los que ya existen, según lo refirió Martha Gabriela Gómez, del Instituto en Ciencias de la Tierra de la Universidad Michoacana.
Con hermano o sin nuevo volcán, el Paricutín por si solo ha sido inspiración para investigadores, escritores y artistas como Gerardo Murillo, mejor conocido como el Dr. Atl, quien se autoproclamó médico partero y biógrafo del nacimiento en su libro «Cómo nace y crece un volcán: El Paricutín
