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El conflicto entre el gobierno federal y MVS por la retirada de las concesiones en la banda 2.5 Ghz que sostenía el corporativo, se ha convertido en batalla campal.
Ahora además de los dos actores principales se han sumado a la guera de declaraciones y calificaciones tanto Televisa como Andrés Manuel López Obrador.
A través de un comunicado, Grupo Televisa se deslindó de las declaraciones en su contra que hizo Joaquín Vargas Guajardo, presidente ejecutivo de MVS
Comunicaciones, quien durante una conferencia de prensa la mañana de este miércoles, acusó al gobierno federal de chantajear a la compañía a cambio de diversos beneficios para la televisora de San Ángel.
Televisa señaló que el tema central que afronta MVS es un diferendo con el Gobierno sobre el monto de la contraprestación que tiene que pagar al Estado mexicano.
«Televisa es ajena a esas discusiones«, acotó la empresa en un breve comunicado.
«Ojalá MVS se sume a una era de apertura, modernidad y competencia, en beneficio de los consumidores mexicanos», señaló la televisora.
Ello luego de que MVS denunciara de manera pública a tres funcionarios del gobierno federal, dos de ellos en activo y otro en vías de llegar al Senado de la República, de condicionar la renovación de sus concesiones en la banda de 2.5 Gigahertz (Ghz) a cambio de diversos actos en favor de Grupo Televisa, así como el despido definitivo de la periodista Carmen Aristegui.
En tanto, desde su cuenta de Twitter, el candidato de las izquierdas manifestó su respaldo al empresario Joaquín Vargas por las concesiones en la banda 2.5 Ghz.
«En el asunto de MVS le creo a Joaquín Vargas, es un hombre decente, los otros no tienen autoridad moral. Es una canallada más del régimen”, dijo López Obrador en la red social.
