Bien Educadas… Sexualmente
Por La Eriz
Muy bien muchachas, repitan conmigo: vagina, pene, ginecólogo, menstruación, masturbación, pastillas anticonceptivas, condón… A ver, otra vez: condón. No, no se escuchó: condón. Condón, condón, condón, condón. Aprópiense de la palabra, estírenla, jueguen con ella, ¡Úsenla, carajo!
Dejamos atrás el siglo XX, años de desarrollo vertiginoso en tecnología, arte y cultura, pensamiento social. Décadas de modernización de las máquinas; vuelcos para los medios de comunicación, empezando con los electrónicos pero sobre todo con el invento del Internet; la llegada de nuevos paradigmas a nuestras sociedades. Los 1900’s gritaron para demostrar la evolución humana… Pero a nosotras nos da pena responsabilizarnos de nuestros actos, sobre todo si tiene que ver con nuestro pecaminoso cuerpecito.
Así, neta neta, ¿cuántas veces has ido a comprar condones a la farmacia? Los empleados de mostrador, afirman que llegan más chicas a pedir pruebas de embarazo que condones: “Para los condones mandan al chavo, ellas ni voltean, como si no vinieran juntos”.
¿No deberíamos de ser las más interesadas en tener condones en todo momento? Digo, una podría darle vuelo a la hilacha si así lo quiere, pero siempre con inteligencia. Como sea, inevitablemente quien paga el chistecito somos las chavas en caso de salir embarazadas: la onda de saber qué hacer, decirle a la familia, cargar con un bebé nueve meses si decides quedártelo (porque la otra es pasar por un legrado oculto, ilegal en Michoacán y en quién sabe qué condiciones de higiene).
Pero además de eso, las ETS. Ir con el ginecólogo, someterse a un tratamiento carísimo, además de engorroso. En caso de tener alguna incurable, controlarla toda tu vida. Llegar con tu pareja y decirle: “mi amor, ya nos fastidiamos la existencia… Por cierto, ponte tu cremita”. Nada mejor para terminar con la pasión.
No hace mucho escuché una de las frases más tontas de un chico a cierto grupo de niñas: “Vamos, tengan mucho sexo… Pero no usen condón, no está chido, no está in” ¿Y de cuándo acá está de moda cuidarse? Basta de calenturas estúpidas que pueden causarnos hasta la muerte. Parece que nos hemos olvidado de enfermedades tan graves como el SIDA, nuestro verdadero asesino silencioso.
Por eso siempre exige un condón o cómprate los tuyos. Cárgalos siempre. Aprende a ponerlos y hasta intercambia técnicas o juegos para utilizarlos. Que no te de pena, ni asco. O dime: ¿Hasta cuándo será exclusiva de los hombres la decisión de protegerse durante los encuentros sexuales? ¿Tú cuándo dejarás de ser la chica del “yo nunca” al “yo siempre”?
Twitter: @LaEriz
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