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El personal del Zoológico de Chapultepec no debió aplicar la anestesia a Bantú por sus problemas de salud, es la conclusión a la que llegó la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Bantú tenía problemas en el hígado y sobrepeso, por lo que no se le debía administrar la anestesia que le provocó la muerte, según arrojaron los estudios histopatológicos realizados a los restos del animal.
Al parecer Bantú no tenía un control médico aceptable, pues los veterinarios tuvieron que prohibir la aplicación de la anestesia.
Dentro de la anestesia se aplicaron dos dosis de medetomidina a Bantú, a pesar de que el protocolo solo permite una. Además, aplicaron mayor cantidad de otras sustancias como ketamina y tiletamina/zolacepam.
Recordemos que los peritos patólogos aseguran que se administró la anestesia conforme lo indican los protocolos internacionales y que fue adecuado.
Este estudio fue realizado por la Universidad Nacional Autónoma de México, a petición de la Dirección General de Zoológicos y Vida Silvestre de la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México.
Con info de agencias.