Parábolas // By Camila Cienfuegos
Por Camila Cienfuegos (La hija pródiga)
Durante sus correrías por tierra santa, Jesús solía hablar con “parábolas”, y los propios apóstoles le cuestionaban el sentido de sus dichos ante las multitudes. Y es que Jesús y los apóstoles ostentaban un nivel de percepción distinto al de las ignorantes masas. Jesús explicaba a sus compañeros que debía hablar así para ser comprendido “El que tiene oídos para oír que oiga” –decía-.
Y también quizá las parábolas guardan en su contenido algunas de las historias más hermosas y fascinantes de la Biblia; una de mis favoritas es la del Hijo Pródigo, que narra las andanzas del hijo menor de un rico que malgasta su herencia, luego, arrepentido y miserable vuelve a su padre que lo recibe con una gran fiesta. Pero el hijo mayor se muestra receloso y cuestiona las razones de su padre que simplemente le responde: “Hijo, tú siempre estás conmigo, y todo lo mío es tuyo; pero convenía celebrar una fiesta y alegrarse, porque este hermano tuyo estaba muerto, y ha vuelto a la vida; estaba perdido, y ha sido hallado”.
Y es que pareciera que solo siendo padre o madre se entiende cuando un hijo ausente vuelve al hogar.
No conozco un político que hable con parábolas, o lo que es lo mismo: con un lenguaje entendible por las masas, excepto AMLO, pero el problema del tabasqueño estriba en el uso del lenguaje anodino; ese que la gente ávidamente quiere oír, que no comprende sutilezas, que no se molesta en explicar razones. Un lenguaje acusador: “Ellos son los malos y yo soy el bueno y por eso me quieren borrar”.
Por eso no es exagerado calificarlo de mesiánico, pero hasta en la biblia se advierte de los falsos profetas.
LAS PARÁBOLAS DEL PAPA
Al Papa francisco también le gusta hablar con parábolas, o por lo menos en algo parecido a ellas, después de todo, el lenguaje religioso se debe estandarizar, se debe hacer comprensible para la numerosa grey, pero al mismo aterciopelado para los gobiernos locales que nerviosos, aguardan la línea precisa, en la que por tan solo una palabra se podría tornar peligrosa para enrarecer la legitimación del gobierno. ¿Imaginan a don Francisco refiriéndose a los familiares de los 43 que rezará por ellos? ¿Se lo imaginan diciendo que él no abandonará a quienes fueron mancillados por el crimen? Bastaría incluso que recordara esa emblemática frase para tambalear al gobierno: “bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia porque ellos serán saciados”.
Definitivamente los discursos papales se deben leer entre líneas, y yo no tengo la menor duda de que incluso haya alguna negociación para que el Estado mexicano metiera mano en los discursos.
JUSTICIA COREANA
Para quienes piensan que en Corea del Norte hicieron justicia ejecutando al jefe del Ejército por corrupción, les voy a platicar grosso modo y de la manera más breve posible cómo se hace justicia en ese país comunista:
Paso 1. Se acusa al susodicho (por orden de Kim Jong-un).
Paso 2. Se le sentencia a muerte y;
Paso 3. Se le ejecuta.
(Espero no haberme extendido mucho).
Mucha gente quisiera que eso sucediera en México pero…para el tipo de justicia que tenemos, la verdad es que yo preferiría un criminal libre que un inocente muerto.
YO YA QUIERO FALLECER
Ya entendí que 100 colonias de Morelia se quedarán sin transporte público con motivo de la visita del Papa pero…¿qué culpa tiene el vino? O sea ¿Por quéeeeeeeeeee?
LAS LLAVES DE LA CIUDAD
No me gustaría que mientras Poncho Martínez le entrega la llave de la ciudad al Papa, ésta se cayera y se hiciera mil pedazos. Es lo malo del barro. En lo particular a mí no me gustó la llave.
¡¡¡Excelente viernes para todoooooooooooooooos!!!