STAFF / @michangoonga
Este viernes, se cumplen dos semanas de que los integrantes de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) instalaron un plantón indefinido en el primer cuadro de la ciudad, en rechazo a la reforma Educativa, situación que ha generado pérdidas de 53 millones de pesos.
Así lo informó en entrevista para Changoonga, el presidente de la Asociación de Comerciantes y Vecinos del Centro Histórico de Morelia (Covechi), Alfonso Guerrero Guaderrama, quién detalló que diariamente dejan de percibir un total de 3 millones de pesos ante el ausentismo de propios y extraños que evitan a toda costa acudir al corazón de la ciudad, para evitar el tráfico vehicular y la suciedad que generan los manifestantes.
“Además de causar una muy mala imagen, la gente no quiere venir al centro, buscan alternativas para realizar sus compras o para ir a pasear y esto obviamente nos ocasiona disminuciones en nuestras ventas”, lamentó.
El líder empresarial dijo que en promedio tienen bajas en las ventas en cada manifestación por encima del 60 por ciento, mientras que con los plantones la disminución oscila entre el 30 al 35 por ciento.
Explicó que la diferencia se debe a que cuando existen movilizaciones sociales y que incluso en muchas ocasiones deriva en conatos de violencia, los trabajadores de distintas áreas, así como visitantes evitan a toda cosa acudir al primer cuadro de la ciudad, pero con los plantones, se restablece un poco las ventas, debido a que la burocracia de los distintos poderes, así como los habitantes tienen que regresar a sus actividades cotidianas.
“Pero nunca se compara a cuando tenemos un lleno total de turistas y un centro limpio, cuidado y con gran fluidez de personas, seguimos y seguiremos teniendo pérdidas de no arreglarse esta problemática”, manifestó.
Guerrero Guaderrama lamentó que el centro de la ciudad de la cantera rosa, catalogado como Patrimonio Cultural de la Humanidad, se haya convertido en un mercado con la venta de todo tipo de artículos, además de la basura que genera en las principales avenidas, los olores de heces fecales, orines y el alcohol.
