¡NO al maíz transgénico!
Por Loralach
Escucho el retumbante eco de esa frase, seguida de la palabra “Monsanto” (que no es ningún pinche santo) sino una de tantas empresas que seguramente ya invirtieron en lujitos para nuestros gobernantes esperando el “sí” para sembrarlo por todo el país. Y es que continúa, aunque no estemos muy enterados, esa gran movilización de pueblos indígenas y de grandes organizaciones, como Greenpeace, contra la autorización de siembra comercial de maíz transgénico.
¿Qué es el maíz transgénico? Mientras me imagino un elote gigante invadiendo la ciudad… así más o menos es la visión de lo que viene si se permite que Monsanto, Novartis, Du Pont y otras compañías siembren este cultivo modificado artificialmente con características biológicas provenientes de otras plantas, animales o bacterias.
Esta modificación resulta en su resistencia al uso de herbicidas y además de tener la peculiaridad (o poder mutante) de matar a los insectos que la atacan (oh mai!), haciendo que sus semillas pierdan la propiedad de reproducirse naturalmente.
¿Qué puede hacer a nuestro ambiente? Además de afectar la fertilidad de la tierra por su “maravilloso herbicida todo incluido”, ataca algunas especies de gusano entre las que se encuentra el de la mariposa monarca, contaminando cultivos convencionales, orgánicos, alimentos, la miel y acabando con las plantas nativas de maíz.
¿Y a la hora de consumirlo? Monsanto se rehusó a revelar los resultados negativos de toxicidad en los órganos de las ratas de laboratorio, negando información pública y vital que demuestra los problemas que este maíz puede causar a la salud humana. ¿Por qué la omisión?
No nos olvidemos de los campesinos, quienes también se verán afectados con la permisión de la siembra comercial de este cultivo mutante, pues tendrán que volverse esclavos de la tecnología (si pueden pagarla) o ya de plano irse de mojados porque no habrá como aprovechar sus tierras.
México es el centro de origen del maíz. Aquí se concentra, muy probablemente, la mayor diversidad de maíz del mundo y aquí han evolucionado, si nos quedamos esperando el “ahí Dios dirá”, seguramente nos veremos apañados de “elotes X” que estarán dañando nuestro medio ambiente y nuestra salud.
¿Qué podemos hacer? A la hora de hacer súper, tratar de consumir productos meramente orgánicos, pero sabiendo que esto está de moda y los precios son muy altos, por lo menos tratar de concientizarse sobre la empresa que manufactura lo que consumes. Además de adherirte a campañas promovidas por organizaciones civiles y no dejar de lado las redes sociales como medio de presión.
¡Chulada de maíz prieto!… Una tortillita hecha a mano, con nuestro maíz y cultivado por nuestra gente… guaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa… ¡hace hambre, amá!
Facebook.com/ColumnaChangoonga
Changoonga.com no necesariamente adopta como suyos los choros, chorizos, morongas y chistorras publicados en ella y deja en sus respectivos padres (autores) la responsabilidad de todas las barrabasadas y debrayes que aquí plasman, producto de las ardillas hiperactivas que habitan en sus macetas. Si te gusta, ¡dale like y comparte!