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Diez migrantes de Jacona, Michoacán, provenientes de los estados de Colorado y Florida, fueron asaltados mientras regresaban a sus hogares, siendo interceptados en Salamanca, Guanajuato, por sujetos armados que se hicieron pasar por la Guardia Nacional.
El robo se registró en la madrugada, cuando los migrantes viajaban por el tramo carretero Silao-Salamanca. Durante varias horas, los agresores retuvieron a las víctimas, despojándolas de dinero, teléfonos móviles y otras pertenencias valiosas. A pesar de la tensión y el miedo, no se reportaron víctimas mortales ni heridos graves. La última comunicación que tuvieron los migrantes fue alrededor de la 1:00 a.m., cuando informaron que se dirigían hacia Silao, sin que se pudiera establecer contacto posterior por un tiempo, según el testimonio de Jesús Ismael Abigail Guillén, una de las víctimas
Afortunadamente, las autoridades locales, en colaboración con las autoridades migratorias, lograron localizar a los migrantes al amanecer del día siguiente. Fueron encontrados en buen estado, aunque las pertenencias de las víctimas no fueron recuperadas.
Salamanca ha sido escenario de diversos incidentes violentos relacionados con disputas entre cárteles criminales, lo que ha llevado a las autoridades municipales, estatales y federales a reforzar las medidas de seguridad en la región, incluyendo el envío de 400 soldados y el uso de helicópteros para patrullajes aéreos.
